­La fiscalía reclama penas que suman 12 años de prisión para un joven portugués por acuchillar a tres hombres en un bar de Punta Ballena, en Magaluf, tras una pelea durante la noche de Halloween de 2013. El supuesto agresor, de 26 años de edad, atacó a las víctimas con una navaja de siete centímetros de hoja tras percatarse de que un compatriota había sido apuñalado momentos antes en otro pub de la popular zona de ocio nocturno. El sospechoso creía que el autor de las primeras cuchilladas, un británico de 31 años, se hallaba en el local. Por ello, se dirigió al establecimiento y la emprendió a navajazos contra varios de los presentes.

El imputado hirió a tres hombres en brazos, abdomen, tórax y muñeca, sin que ninguno de ellos fuera el atacante de su allegado. Este segundo sospechoso, natural de Reino Unido, supuestamente había agredido primero con un arma blanca a un portugués, a quien apuñaló en la cabeza y la cara. El ministerio público solicita para él una condena de cuatro años de cárcel.

El juicio por la reyerta ocurrida en la madrugada de Halloween del pasado año en Punta Ballena (Calvià) cuando dos grupos de trabajadores de pubs celebraban el fin de la temporada turística y se enzarzaron en una acalorada disputa está previsto que se celebre la próxima semana en Palma.

El fiscal considera al principal acusado, el joven portugués, autor de tres delitos de lesiones. Además de los 12 años de prisión, pide que el sospechoso indemnice a los tres perjudicados con más de 30.000 euros por las heridas y secuelas causadas. Mientras, al imputado de Reino Unido le acusa de un delito de lesiones, por el que reclama cuatro años de cárcel y una compensación de más de 4.000 euros.

Los hechos se remontan a la madrugada del pasado día 1 de noviembre de 2013 cuando se desencadenó una acalorada discusión entre dos grupos de empleados de bares de la zona de Punta Ballena. Sobre las tres y media de la mañana, un británico de 31 años armado con un arma blanca agredió a un portugués en un conocido bar de Magaluf, según la versión de la acusación pública.

El afectado sufrió una cuchillada de siete centímetros en forma de L en el cráneo y otros dos cortes en un pómulo de cuatro y dos centímetros, respectivamente. Tardó diez días en curar de las lesiones y le han quedado cicatrices como secuela que le producen un perjuicio estético ligero.

Tras esta primer agresión, el otro imputado, un joven portugués de 26 años, al darse cuenta de que un compatriota y allegado había sido apuñalado en el local, decidió salir en busca del culpable. Según el fiscal, el luso creía que el atacante británico se encontraba en otro pub de la zona. Así, se dirigió allí y presuntamente agredió con una navaja a un extranjero y a otras dos personas que acudieron en su ayuda intentando que depusiera su actitud.

En total tres hombres fueron acuchillados en distintas zonas: brazos, pecho, abdomen, muñeca. Los perjudicados tuvieron que ser evacuados al hospital donde les aplicaron puntos de sutura y uno de ellos tuvo que ser intervenido ya que sufrió la sección de los tendones de una mano. Las víctimas padecen como secuela varias cicatrices y una de ellas tiene limitada la movilidad en una mano.