Un juzgado penal de Palma inició ayer la vista oral contra dos hombres acusados de cometer cuantiosos robos a turistas que acababan de llegar a la isla cuando estos aún se encontraban en el aparcamiento del aeropuerto de Son Sant Joan. La fiscalía solicita para uno de los imputados cuatro años y medio de prisión y una multa por un delito continuado de hurto, otro continuado de estafa y daños. Mientras, para el segundo sospechoso, reclama cinco años de cárcel y una multa.
Ayer por la mañana se practicó una prueba anticipada con varias de las víctimas. Dos mujeres alemanas ratificaron sus respectivas denuncias.
Confirmaron que fueron desvalijadas a su llegada a Palma en mayo de 2012. Los ladrones, a quienes no pudieron identificar, robaron a una de ellas joyas por valor de 2.700 euros, así como cinco tarjetas de crédito con las que luego extrajeron 1.200 euros en una sucursal del Coll den Rabassa. A otra perjudicada, le sustrajeron joyas, dinero y dos tarjetas, con las que sacaron 2.000 euros en un banco en Son Ferriol. En ambos casos, los robos tuvieron lugar aprovechando que las víctimas estaban distraídas cuando introducían el equipaje en sus vehículos.
Los acusados, que aún no han declarado, también están acusados de huir del aparcamiento y romper la barrera. El juicio se retomará el próximo mes de septiembre.
