Un aparatoso accidente de tráfico provocó ayer retenciones kilométricas en uno de los principales accesos a Palma. Seis personas tuvieron que ser atendidas después de sufrir lesiones de carácter leve. El siniestro se produjo cuando un autobús y cuatro turismos se vieran involucrados en una colisión múltiple.
El accidente ocurrió sobre las nueve y cuarto de la mañana de ayer en el kilómetro 3,100 de la MA-19. Un autobús se disponía a incorporarse al desvío hacia la Via de Cintura hacia Andratx, procedente de la autovía de Llevant en sentido Palma, cuando frenó en seco al tomar la curva. Otros cuatro turismos que le sucedían no pudieron evitarlo y resultaron implicados en una colisión múltiple por alcance.
El siniestro no tardó en provocar numerosas retenciones. Los accesos a la Vía de Cintura en sentido Andratx por la autopista y la entrada al Paseo Marítimo resultaron colapsadas en cuestión de pocos minutos. El atasco de vehículos llegó a alcanzar una longitud de un kilómetro y medio.
Numerosos efectivos de la Guardia Civil de Tráfico se desplazaron hasta el lugar para tratar de regular la circulación y esclarecer las circunstancias que rodearon la colisión múltiple.
Asimismo, múltiples ambulancias acudieron al punto donde se había producido el accidente. Una decena de personas se habían visto implicadas en el siniestro. Un total de seis de ellas sufrieron lesiones de carácter leve y las otras cuatro resultaron completamente ilesas, pese a lo aparatoso de la colisión múltiple.
Las víctimas fueron trasladadas en primera instancia hasta la Clínica Juaneda. Dos mujeres fueron examinadas en las urgencias del centro sanitario. Unas horas después recibieron el alta hospitalaria.
Alta hospitalaria
Los otros afectados fueron derivados hasta la Clínica Rotger. Allí fueron sometidos a una exploración para comprobar el alcance de las lesiones. También fueron dadas de alta poco después.
Los servicios de limpieza del Departamento de Carreteras del Consell de Mallorca se movilizaron con rapidez para tratar de despejar los numerosos objetos esparcidos por la calzada. La circulación se convirtió en este tramo en una suerte de embudo. Unas dos horas después, recobró la normalidad.
