Unas doscientas personas se concentraron ayer en la plaza de Santa Ponça justo en el día en que se cumplían seis meses de la desaparición de Malén Ortiz. Natalia Rodríguez, madre de la adolescente, estuvo por primera vez detrás de la convocatoria.
"No existen palabras para describir el calvario que estoy pasando", expresó la madre de la menor entre sollozos. "¡Esta maldita espera nos está consumiendo!", exclamó.
No obstante, Natalia Rodríguez instó a todos los presentes a no perder la esperanza y a no cejar en el empeño de la búsqueda de Malén. "No voy a perder la esperanza hasta el día que la pueda volver a abrazar", resaltó.
La madre de la adolescente desaparecida mostró su confianza hacia las pesquisas de la Guardia Civil aunque instó a que "no se esté un minuto sin investigar".
A partir de las siete de la tarde, numerosos allegados de la madre de la adolescente desaparecida se fueron acercando hasta la plaza de Santa Ponça. Una pancarta con una imagen de la menor, colgada entre dos árboles, rezaba "lamentablemente se cumplen seis meses sin rastro de mi Malén Zoe".
Familiares y amigos de la progenitora se abrazaron a ella y trataron de insuflarle ánimos para afrontar estos duros momentos. Natalia Rodríguez reconoció que ha tenido que armarse de fuerzas para echarse a la calle a protestar por la desaparición de su hija. "Es un ejercicio muy grande para mí ponerme frente a tantos medios", manifestó la madre a la prensa.
A distancia
A escasos metros de distancia, el padre de la menor desaparecida, Alejandro Ortiz, se unió a la concentración portando su propia pancarta un día después de haber convocado una protesta entre Magaluf y Son Ferrer. El progenitor de Malén acudió en compañía de su otro hijo, que en ningún momento se apartó de su lado.
El desencuentro entre los padres de la menor desaparecida quedó patente, ya que en ningún momento llegaron a cruzar ninguna palabra. Aunque el progenitor quiso restar importancia a este hecho. "No hay ninguna guerra contra nadie. Para Bruno (su hijo) y para mí lo más importante es encontrar a Malén. Apoyamos a la madre y todo el que convoque una concentración para encontrarla nos va a tener de su lado", subrayó Alejandro Ortiz.
El padre de la adolescente también expresó su apoyo a la Guardia Civil por la investigación que lleva realizando desde aquel aciago 2 de diciembre cuando desapareció su hija. "No bajan la guardia", insistió.
Sobre las tres de la tarde del pasado 2 de diciembre, Malén Ortiz se bajó del autobús en la rotonda de Piratas, en Magaluf. La menor de 15 años llamó a su padre por teléfono y le comunicó que no iría a comer a casa y que se dirigía a casa de su novio en Son Ferrer. Nunca llegó allí.
La última imagen que se obtuvo de la menor es la que grabó de ella una cámara de videovigilancia mientras pasaba por delante del vivero de sa Porrassa. Más allá de este punto, su rastro se pierde por completo.
Durante este medio año de su desaparición, la Guardia Civil puso en marcha un espectacular dispositivo de búsqueda de Malén Ortiz y ha practicado numerosas diligencias. Hasta el momento, no hay noticias de ella.
