Los investigadores de la Policía Local de Palma mantienen abiertas todas las hipótesis sobre el accidente que en la madrugada del domingo costó la vida a José Luis de Fuertes, cuando su coche colisionó con otro en la confluencia de la calle Puerto Rico y la avenida de México, en el Polígono de Levante de Palma. El conductor del otro vehículo, un hombre de 30 años que dio positivo en los análisis de alcohol y drogas y que según los primeros indicios circulaba a una velocidad superior a la permitida en la zona, prestó declaración ayer por la mañana en el cuartel de Sant Ferran y mantuvo que cruzó el paso semafórico en verde.

El cruce en el que se produjo la violentísima colisión está regulado por semáforos. Los técnicos municipales han revisado la instalación y han confirmado que funcionan perfectamente, de lo que se desprende que uno de los implicados cruzó en rojo. Determinar quién fue será uno de los objetivos de los investigadores. Durante el día de ayer, un coche de la Policía Local repitió los recorridos seguidos por los dos coches implicados para tratar de reconstruir la secuencia.

El accidente ocurrió a la una y media de la madrugada del domingo. El turismo Audi A1 conducido por José Luis de Fuertes, de 43 años, trabajador del Diario de Mallorca que acababa de concluir su jornada laboral, chocó contra un Seat Ibiza en el que circulaban dos hombres, de 30 y 32 años. José Luis de Fuertes falleció en el acto, mientras que los otros dos implicados resultaron con heridas leves.

El conductor del Seat Ibiza mantuvo ayer en su declaración ante la Policía que él cruzó la intersección con el semáforo en verde. Admitió, no obstante, que podía circular a una velocidad de entre 60 y 70 kilómetros hora, pese a que en la calle la limitación es de 50 kilómetros hora. Las estimaciones de los investigadores apuntaban a que la velocidad del coche cuando ocurrió el accidente podría ser superior, en torno a 80 kilómetros hora. En el Ibiza quedó encajada la cuarta marcha tras el tremendo impacto.

Los controles a los que fue sometido el conductor en el hospital de Son Espases dieron positivo en alcohol -ligeramente por encima del límite permitido por la ley- y drogas. En su declaración, el hombre mantuvo que había consumido dos cervezas poco antes del accidente, mientras que las trazas de drogas respondían a un consumo realizado días antes.

Mientras tanto, la Policía prosigue con las investigaciones para conformar un atestado que se presume complejo, y que puede tardar un mes en estar concluido.

Los agentes han tomado declaración a varios testigos. Uno de ellos, que trabaja como guardia de seguridad en el edificio del Diario de Mallorca, manifestó que había estado junto a José Luis de Fuertes justo antes del siniestro. Estuvieron hablando y le había acompañado hasta el lugar en el que tenía aparcado su coche. Recordaba que José Luis de Fuertes esperó, hablando con él, hasta que el semáforo de la calle Puerto Rico con Joan Maragall se puso en verde, y emprendió la marcha. El guarda volvió a su puesto de trabajo pero no le dio tiempo a llegar. Poco después oyó "un ruido espantoso, como una explosión" en la avenida de México y vio a lo lejos los coches accidentados.

Los vehículos fueron trasladados a las dependencias de la Policía Local, donde serán sometidos a un riguroso examen.

José Luis de Fuertes, de 43 años, trabajaba en la sección de cierre de Diario de Mallorca desde hace quince años y su fallecimiento ha provocado un profundo pesar entre sus compañeros. Deja mujer y dos hijos pequeños. Su funeral se celebrará hoy a las ocho de la tarde en la iglesia de La Purísima Concepción de sa Vileta.

El president del Govern, José Ramón Bauzá, expresó ayer su pésame a la familia y compañeros del diario, condolencias que se suman a las que en los últimos días han remitido instituciones, colegas y lectores de Diario de Mallorca.