Dos niños provocaron ayer un aparatoso incendio en un edificio de s´Arenal cuando jugaban con un mechero en la terraza de su casa. El fuego prendió con rapidez en los muebles y la ropa que había tendida en el balcón y se extendió en cuestión de segundos. Las llamas dañaron también a la vivienda contigua y el humo afectó a las dos plantas superiores. La treintena de vecinos que había en ese momento en el inmueble lograron ponerse a salvo y no hubo que lamentar heridos. Los bomberos tuvieron que trabajar durante tres cuartos de hora para sofocar las llamas, ventilar la finca y comprobar que no había sufrido daños estructurales.

Los hechos ocurrieron poco antes de las doce y media del mediodía en el número 14 de la calle Trasimeno. De pronto, la terraza del tercero A quedó envuelta en llamas. Los muebles de mimbre y las colchas que había tendidas propiciaron que el fuego se extendiera y una densa humareda se adueñó de buena parte de la fachada. Vecinos y testigos alertaron de inmediato a los servicios de emergencias. La Policía Local y los Bombers de Palma se movilizaron enseguida y acudieron al lugar con máxima prioridad.

Mientras tanto, los vecinos de la finca, de cinco plantas y con un total de 20 viviendas, comenzaron a salir a toda prisa del inmueble. Algunos tuvieron tiempo de rescatar algunas de sus pertenencias, como un niño que sacó la jaula de su canario para evitar que se asfixiara.

Cuando los bomberos llegaron al edificio, el fuego se había extendido a la terraza del tercero B y comenzaba a entrar en las habitaciones que dan acceso a las dos viviendas de esa planta, algunos de cuyos muebles resultaron dañados. El denso humo afectó también a las viviendas de la cuarta planta y, en menor medida, de la quinta.

Los bomberos lograron sofocar el fuego en apenas unos minutos y evitaron que se adentrara en los cuartos. La Policía Local cortó la calle al tráfico para facilitar su labor. Los servicios sanitarios tuvieron que atender a un anciano que utiliza un respirador de oxígeno, aparato que no pudo llevarse consigo cuando salió de casa al declararse el incendio, aunque no resultó intoxicado. Hacia la una y media de la tarde, después de que los bomberos comprobaran que la estructura del edificio estaba intacta, los vecinos pudieron regresar a sus casas.

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía acudieron también al lugar y abrieron una investigación para esclarecer lo ocurrido. Según las pesquisas, fueron dos niños de unos ocho años los que provocaron el incendio cuando estaban jugando con un mechero en la terraza donde se iniciaron las llamas. "Los niños han entrado al piso diciendo que había fuego. Estaba todo envuelto en llamas, pero no sabemos cómo ha empezado", señalaba un familiar de los pequeños. Estaba previsto que la Policía Científica examinara el lugar para certificar las causas del incendio, explicaron fuentes policiales.