La Guardia Civil ha detenido a un vecino de Petra que tenía una plantación de marihuana y cuya vivienda era un punto de venta de esta sustancia estupefaciente. Los agentes se han incautado de diez kilos de droga, que estaban distribuidos en botes, y diverso material para su cultivo y manipulación. Según informó ayer el instituto armado, el operativo fue llevado a cabo hace unos días por agentes del puesto de Petra. Las pesquisas de los investigadores permitieron descubrir que una vivienda de la localidad era un punto de venta de marihuana. Los guardias consiguieron ubicar el lugar en el que se cultivaban las plantas y comprobaron que la sustancia era plantada, fertilizada, cosechada y vendida en un patio del inmueble. La Guardia Civil encontró en el domicilio unos 10 kilos de marihuana distribuida en botes de diferentes tamaños, así como focos, tendederos secaderos, y fertilizantes. El presunto propietario quedó detenido.