El preso de la cárcel de Palma al que la Policía francesa vincula con un robo millonario de joyas cometido en mayo en Cannes niega su implicación en los hechos. El sospechoso, que fue encarcelado a finales de junio tras ser detenido por una oleada de hurtos en hoteles en el norte de la isla, afirma que ni siquiera se encontraba en Francia cuando desaparecieron las valiosas alhajas, valorados en 1.400.000 euros, de la caja fuerte de un hotel durante el festival de cine de Cannes.
Las autoridades francesas solicitaron hace dos semanas una comisión rogatoria para interrogar al acusado, un francoargelino de 40 años, acerca del robo de las joyas. Las pesquisas sobre la sustracción de las joyas, cometida el 17 de mayo en la habitación que ocupaba un empleado de una marca de lujo, llevó a los investigadores franceses hasta este hombre. Según averiguaron, estaba encarcelado en Palma por una oleada de robos.
El acusado fue arrestado por la Guardia Civil a finales de junio tras ser sorprendido in fraganti por los empleados de un establecimiento hotelero de Cala Rajada. En el momento de su detención, llevaba encima 6.000 euros en efectivo, de los que intentó deshacerse arrojando los billetes a un inodoro, y joyas valoradas en 50.000 euros. Además, intentó huir amenazando a los testigos con un arma blanca. Los investigadores del instituto armado le consideran autor de 25 robos cometidos durante los meses de mayo y junio en hoteles de la zona norte de Mallorca, en los que el ladrón había forzado las cajas fuertes de las habitaciones. Los agentes creen que formaba parte de una banda especializada en este tipo de robos.
