­El incendio que ha arrasado 2.300 hectáreas de la Serra de Tramuntana ha desatado una ola de solidaridad. Más de 450 voluntarios se han ofrecido al ayuntamiento de Estellencs para limpiar el monte tras los estragos causados por el fuego.

La convocatoria lanzada por el consistorio, en busca de voluntarios que aúnen sus esfuerzos para limpiar el monte, ha encontrado una amplia respuesta. Medio centenar de personas se inscribió en el ayuntamiento de Estellencs para participar en las tareas de forma desinteresada. A esta cifra hay que sumar un centenar que se apuntaron en un turoperador y otros 300 en un club ciclista.

Ante la desmesurada movilización, el alcalde de Estellencs, Tomeu Jover, reconoció que se habían desbordado con creces todas las previsiones. "La respuesta ha sido muy positiva, pero nos supera. El Ayuntamiento no tiene infraestructura suficiente para gestionar correctamente los trabajos de toda esta gente", resaltó.

El primer edil de Estellencs hizo especial hincapié en la complejidad que supone coordinar a tanto personal voluntario. "Tengo que controlar a todos ellos y la responsabilidad recae sobre mis espaldas", abundó. Jover diferenció entre el personal laboral y el voluntario. Este último también contará con un seguro que le cubrirá cualquier posible percance.

"El martes tendremos una reunión con los coordinadores", adelantó el alcalde. La labor de los voluntarios comenzará en cuanto se permita el acceso a la carretera que conecta Estellencs con Andratx, cortada la última semana mientras el incendio no estaba aún controlado.

De cumplirse las previsiones, la carretera que comunica Estellencs con Andratx quedará abierta a mediados de la próxima semana. Hasta el momento la circulación es muy restringida. Solo se permite el paso a los vecinos o a las personas que trabajan en Estellencs o que tienen su puesto de trabajo en Andratx. Los técnicos forestales señalaron con un gran punto verde aquellos pinos que tienen que ser talados de manera inmediata. Su deteriorado estado hace que los troncos amenacen con desplomarse. Su ubicación, junto a la carretera, los convierte en un peligro muy real.

Por otra parte, la sección sindical del sindicato UGT del Consell de Mallorca reclamó ayer, por medio de un comunicado, la reapertura del parque de bomberos de Andratx y la creación de un nuevo parque en la zona del Migjorn de Mallorca: Ses Salines, Santanyí y Campos.

A juicio de esta organización sindical, los estragos causados por el devastador incendio habrían sido mucho menores de haber contado con estas instalaciones operativas. "Es evidente que si el parque de Bombers de Andratx hubiese estado abierto posiblemente hoy no tendríamos más de 2.000 hectáreas quemadas en la Serra de Tramuntana", subrayó el sindicato.

UGT insistió en que, ante un incendio forestal, los servicios de emergencia tienen que activar inicialmente a los Bombers de Mallorca "que tienen un mejor tiempo de respuesta". A continuación, según el sindicato, se han de movilizar las brigadas del Ibanat y los medios aéreos.

Los Bombers de Mallorca lamentaron que durante el devastador incendio forestal en la Serra de Tramuntana habían sido "infrautilizados". Asimismo, varios vecinos de las zonas afectadas por los primeros fuegos denunciaron la falta de bomberos para apagar las llamas en los primeros momentos del siniestro.