Casi un año han tardado los investigadores del Equipo contra el Crimen Organizado (ECO) de la Guardia Civil de Balears en tirar de los hilos que van desde una banda que distribuía grandes cantidades de droga en la zona de Inca a sus proveedores, un clan familiar asentado en Valencia considerado uno de las principales organizaciones de narcotraficantes del Levante español. La larga investigación que partió de la "operación Malamar", en la que hubo once detenidos y se intervinieron más de cinco kilos de cocaína en Mallorca, ha desembocado en la "operación Helios", con otros once detenidos y la incautación de dos kilos y medio de cocaína, mil pastillas de éxtasis, un kilo de hachís y 100.000 euros.

La investigación comenzó en Mallorca hace un año. La Policía Judicial de la Guardia Civil desmanteló a mediados de julio de 2011 una banda de narcotraficantes que operaba en Inca, Llosesta, Sencelles y Son Serra de Marina. Era la "operación Malamar". Más de cincuenta agentes, apoyados por un helicóptero y perros antidroga llevaron a cabo media docena de registros en domicilios y un bar de estas localidades. La operación se saldó con once detenidos, entre ellos un conocido empresario de Inca, y la incautación de cinco kilos de cocaína, un kilo y medio de cristal, 460 pastillas de éxtasis y una plantación de marihuana.

De Mallorca a Valencia

Tras la "operación Malamar", quedó de manifiesto que la banda desarticulada en Inca tenía nexos con otras organizaciones, situadas un peldaño por encima, que las abastecían de droga. Las pesquisas pasaron a manos de los agentes del ECO-Balears. De esta manera comenzaba la "operación Helios".

Los investigadores del grupo expecializado contra el crimen organizado de la Guardia Civil fueron siguiendo el rastro que partía de la banda desarticulada en Mallorca, hasta dar con una importante organización de narcotraficantes asentada en Valencia. Se trataba de un clan familiar que distribuía toda clase de drogas a consumidores, pero que también abastecía de sustancias estupefacientes a otras bandas, como vendedores de droga al por mayor.

Las pesquisas ubicaron las actividades de la banda en las localidades valencianas de Tous, Alberich y Alcàntera del Xúquer, donde tuvo lugar la fase final de la operación. A las seis de la madrugada del miércoles, los agentes del ECO-Balears, desplazados expresamente a Valencia y apoyados por un centenar de guardias de la Comandancia de Valencia, llevaron a cabo ocho registros en domicilios de la zona.

Las gestiones policiales se prolongaron a lo largo de todo el miércoles y el día de ayer. El balance provisional de la operación eran once personas detenidas y la incautación de al menos dos kilos y medio de cocaína, unas mil pastillas de éxtasis, un kilo de hachís ya distribuido en pequeñas piezas dispuestas para la venta a los consumidores, una gran cantidad de sustancias de corte y 100.000 euros.

Durante los registros no se produjeron incidentes graves ni conatos de resistencia. Los once detenidos pasarán presumiblemente hoy a disposición del juzgado de guardia de Valencia.

Los investigadores consideran que la banda desarticulada en Valencia representa uno de los principales grupos dedicados al narcotráfico en la zona del Levante de España.

El grupo presuntamente vendía grandes cantidades de droga en pequeñas partidas directamente a los consumidores en los distintos domicilios de la zona. Pero los investigadores dela Guardia Civil consideran que también actuaban como una especie de mayoristas de la droga, suministrando partidas grandes a otros grupos de traficantes, como el que fue desarticulado hace casi un año en Inca.