Por supuestos malos tratos

Exculpan a unos padres de la muerte de su bebé

El bebé falleció por una extraña enfermedad genética en el cerebro y que los sanitarios tomaron por malos tratos

diariodemallorca.es/efe.palma

Un juzgado de Palma ha archivado la causa abierta contra unos padres imputados por la muerte de una de sus tres hijas que, siendo bebé, falleció por una extraña enfermedad genética que tenía en el cerebro y que los sanitarios tomaron por malos tratos.

La defensa de los progenitores pidió en un escrito su absolución al considerar que no existe ninguna prueba de que la menor sufriera maltrato y que la muerte de la bebé se debió a "un desagradable accidente doméstico" ocurrido en julio de 2010, cuando ingresó en el hospital de Son Dureta.

El centro hospitalario envió al Consell de Mallorca un informe de que las lesiones del bebé se podían deber a malos tratos y la institución insular resolvió entonces declarar el desamparo de las tres hermanas y fijar su tutela por parte de la institución pública.

El abogado Pablo Alonso de Caso afirma que la niña, que falleció meses más tarde de su ingreso, presentaba desde su nacimiento problemas serios de salud consistentes en hemorragias aracnoideas en la cabeza, consecuencia de una dolencia hereditaria de déficit de protrombina que una de sus hermanas también tiene.

De hecho, indica que unos días antes del 2 de julio los padres acudieron al médico para informarle de sus sospechas sobre la enfermedad.

El letrado aporta para la defensa de los padres declaraciones de un pediatra del IB-Salut que afirmó que las niñas "no tienen ningún perfil de ser maltratadas", así como de vecinos que aseguran que nunca escucharon nada fuera de lo común y que las niñas estaban "bien atendidas y felices" y de trabajadores sociales del Consell.

"No se vislumbra por ningún lado una situación de maltrato familiar, de desamparo, de riesgo, ni de incumplimiento o imposible o inadecuado ejercicio de las obligaciones paterno-filiales que deban desembocar en la situación sin sentido en la que se encuentran los hijos de mis representados", afirma el abogado.

Ante estos argumentos, la titular del juzgado de instrucción 4 de Palma, Piedad Marín, ha decretado en un auto el archivo provisional del caso porque "de lo actuado no aparece debidamente justificada la perpetración del delito", que en este caso era un presunto homicidio.

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