La abogada acusada de encargar a un sicario el asesinato de su exmarido en Ciempozuelos (Madrid) ante el temor de perder la custodia de la hija común, negó ayer los hechos en la Audiencia Provincial de Madrid diciendo que nunca pidió a nadie cometer ese crimen, ni siquiera que se le diera un susto.

La declaración durante tres horas y media de María Dolores M.P., para quien el fiscal solicita 39 años de prisión, fue la única celebrada en el primer día del juicio, que terminará en diciembre, y en el que también se sientan en el banquillo otros dos procesados. Se trata de Eloy S.B. –que se enfrenta a 39 años de cárcel–, dueño de una empresa de seguridad privada y que presuntamente contacto con el tercer acusado, Charles Michael G.C. –para quien el fiscal pide 43 años de prisión–, presunto autor de los disparos que acabaron con la vida de Miguel Ángel S.P.

El interrogatorio a María Dolores comenzó después de que en la sala se escucharan unas conversaciones telefónicas en las que la acusada, tras conocer la muerte de su exmarido, dice a algunos familiares que éste se puede "pudrir bajo tierra" y que "se lo coman las víboras". "Está siendo malo hasta después de muerto", afirma en otra conversación.