Un socavón del tamaño de una piscina olímpica y hasta 25 metros de profundidad se abrió ayer de madrugada en el suelo de un área residencial del estado de Turingia (este de Alemania) y se tragó un vehículo, aunque no se registraron heridos.

El agujero tiene casi 40 metros de largo por 15 de ancho y entre 20 y 25 metros de profundidad, según la Policía germana, que ha dispuesto un perímetro de seguridad de 500 metros de diámetro.

Al menos 23 residentes de cinco viviendas próximas tuvieron que ser evacuados por el riesgo a que el agujero se agrande en las próximas horas y las fuerzas de seguridad no descartan nuevas medidas de emergencia en la zona. Los hechos se produjeron sobre las tres de la madrugada en la localidad de Schmalkalden, cuando de repente la tierra se hundió en medio de un fuerte estruendo, lo que alertó a los vecinos.