"Me encontré con mi hijo por la calle y sin mediar palabra me dio un puñetazo en la cara". Un hombre ha denunciado a su hijo de 14 años, experto en artes marciales, por una brutal agresión ocurrida la semana pasada en Palma. La víctima, que sufrió fracturas en los huesos de la nariz y varias contusiones, tiene una orden de alejamiento del menor debido a lo que él considera una "denuncia falsa" de la madre. Ahora, es él quien reclama que se prohíba al adolescente acercársele, ya que se siente "atemorizado" tras este incidente. Francisco Camacho, el padre agredido, asegura que es su ex mujer, condenada el año pasado por darle un botellazo en la cabeza, quien ha puesto a sus hijos en su contra. "Quiero que se sepa que también hay hombres que son maltratados", afirma.

Los hechos, según consta en la denuncia, ocurrieron el martes de la semana pasada hacia las ocho y media de la tarde en la calle Rotaboc, en el barrio de Son Forteza. El hombre salió de un supermercado y se dirigía a su domicilio, junto a su novia, cuando vio en la acera de enfrente a su hijo, un adolescente de 14 años.

"Cruzó la calle y sin mediar palabra me dio un puñetazo en la cara. No se fue corriendo, sino caminando tan tranquilo", explica el afectado. Tras la agresión, un testigo de los hechos llamó por teléfono a la Policía y ratificó la versión del hombre ante los agentes.

La víctima fue atendida en primera instancia en un centro médico y después en el hospital de Son Dureta, donde le diagnosticaron fractura de los huesos propios de la nariz y heridas inciso contusas en el rostro. Tras su paso por el hospital, el hombre denunció los hechos aquella misma noche.

Camacho asegura que tanto él como su novia están "atemorizados" tras esta agresión, ya que el adolescente es experto en artes marciales y ha ganado campeonatos, y han solicitado que se impida judicialmente al menor acercarse a cualquiera de los dos.

"Todo se debe a la influencia de la madre, que ha puesto a nuestros hijos en mi contra", señala el hombre. "Yo me separé de ella hace tres años porque temía que se autolesionara y me culpara a mí", cuenta, con las heridas de la agresión todavía por cicatrizar.

El denunciante no esconde que tiene prohibido acercarse al hijo que supuestamente le agredió desde febrero del año pasado, aunque asegura que se trata de una medida cautelar por una "denuncia falsa" de su ex mujer que todavía no ha llegado a juicio. "Me acusó de haber agarrado por el cuello a uno de mis hijos, pero es mentira", manifiesta.

Agredido por la madre

La relación con su antigua compañera no mejoró tras la separación. De hecho, la mujer fue condenada en julio del año pasado a 56 días de trabajos en beneficio de la comunidad por agredir a su ex marido, al que tiene prohibido acercarse desde aquel incidente.

"Yo estaba sentado en la terraza de un bar. Ella vino y me dio un botellazo en la cabeza", asegura la víctima. La sentencia consideró la agresión como un delito de lesiones en el ámbito familiar.

El afectado, que se considera un "hombre maltratado" se muestra resignado ante esta "desagradable" situación y asegura sentirse "impotente" para ponerle remedio. "A nadie le gusta tener una mala relación con sus hijos", concluye lacónico.