La Policía está dispuesta a terminar con todos los tentáculos del clan de La Paca, la matriarca de Son Banya que está en prisión acusada de tráfico de droga. Los investigadores no sólo pretenden terminar con el negocio del narcotráfico, sino también desmontar el aparato de finanzas de este importante clan que controla el tráfico de drogas en el poblado.

Hace pocas semanas el Grupo de Blanqueo de la Policía detuvo a una mujer, llamada Lourdes, que está considerada la contable de La Paca. Su detención no se practicó en Palma, sino en Valencia, donde parece que es el lugar de residencia de esta mujer.

Según señalaron fuentes próximas a la investigación, la citada Lourdes es una de las personas más próximas a la matriarca del clan de Son Banya. Hasta ahora no tenía ninguna causa pendiente por tráfico de drogas, ya que ella no participaría directamente en el negocio. Su papel se limitaría a blanquear las ganancias que se obtienen vendiendo droga en el poblado.

Esta mujer, que ingresó en prisión pero que en la actualidad está en libertad tras pagar una elevada fianza, visitaba con frecuencia a Francisca Cortés Picazo en el centro penitenciario de Palma, donde lleva ingresada más de un año y medio. Se sospecha que en estos encuentros La Paca le habría dado órdenes a su contable para que distribuyera el dinero que habría ganado con el negocio.

La Policía ha localizado la adquisición de una serie de bienes inmobiliarios cuya compra la habría gestionado la citada Lourdes. Esta mujer habría comprado pisos y fincas por varias localidades de Mallorca. Fuentes policiales reconocieron que hay otros bienes comprados por orden de La Paca que todavía no se habrían localizado.

Los especialistas en la lucha contra el tráfico de drogas de la Policía de Palma están convencidos de que Francisca Cortés Picazo sigue dirigiendo desde prisión el negocio ilegal que durante años ha mantenido en el poblado de Son Banya. Su estancia en prisión, lógicamente, le limita sus movimientos, pero parece que aprovecha las visitas que recibe de las personas de máxima confianza para darles órdenes, tanto de la ubicación de los puntos de venta, como de la distribución de los beneficios del negocio.

Duros golpes

Sin embargo, no le están saliendo muy bien las cosas a La Paca, ya que hace pocas semanas la Policía encontró el escondite, situado bajo la cimentación de un garaje, donde el clan guardaba casi cuatro millones de euros en metálico, así como varios kilos de joyas que se habrían aceptado a cambio de droga.

Las fuerzas de seguridad llevan años sospechando de la participación de la citada Lourdes en los negocios de su amiga Francisca Cortés. Esta mujer residió en una vivienda de la barriada de La Soledat que hace algunos meses sufrió un robo. Unos jóvenes entraron en la casa armados con picos para derribar las paredes, ya que creían que detrás de estos muros iban a encontrar una caja repleta de billetes. No fue así, porque no había dinero, y los ladrones tuvieron que huir, aunque ese mismo día fueron detenidos por la Policía. Lourdes dijo que la casa era suya, pero la Policía sabía que actuaba solo como testaferra, y que en realidad la vivienda era de La Paca. En uno de los muebles aparecieron varias fotografías personales de la matriarca del poblado. En una de ellas, por ejemplo, salía retratada al lado de sus dos chimpancés.

Esta nueva investigación por blanqueo de dinero sigue abierta y no se descarta que en breve la Policía pueda practicar nuevas detenciones.