Los investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil mantienen abiertas todas las hipótesis en el caso de la muerte de Manuel Trejo Pomar, el joven de 24 años que fue encontrado el miércoles junto al radiofaro de Capdepera. Las conclusiones de la autopsia apuntan a que las lesiones que sufría el joven eran compatibles con un atropello de un coche, por lo que se intenta averiguar qué vehículos subieron allí el miércoles. Al mismo tiempo, los agentes realizan gestiones en todos los talleres de la zona para tratar de localizar el vehículo que pudo haberle arrollado, y se ha tomado declaración a los amigos y allegados de la víctima para tratar de determinar si alguien pudo querer matarle.

Hasta ayer ninguna de estas gestiones había aportado luz al caso. La práctica de la autopsia, realizada el jueves, descubrió lesiones en las piernas que apuntaban a que el joven pudo ser arrollado por un coche. Sin embargo, la carretera junto a la que apareció el cadáver no parece muy adecuada para circular a mucha velocidad. Es estrecha y está cubierta de gravilla. Esta circunstancia tampoco permite descartar este extremo, ya que no es necesario que un vehículo vaya muy rápido para que provoque graves lesiones a un peatón.

En el caso de que el atropello fuera accidental, se trataría de un caso de omisión del deber de socorro. Sin embargo, los investigadores tampoco descartan que el atropello fuera intencionado, con lo que pasaría a ser un caso de homicidio.

Pero esta vía de investigación choca frontalmente con los datos que los agentes han recopilado tras tomar declaración a los amigos y allegados del fallecido. Manuel Trejo era un joven absolutamente normal, trabajaba como albañil y no hay constancia de que se sintiera amenazado o que alguien quisiera matarle.

La Guardia Civil se centra ahora en la búsqueda del vehículo que pudiera haber atropellado al joven y en recopilar toda la información posible sobre él, en especial en los días previos a su muerte. Los agentes recopilaron también una gran cantidad de restos en el lugar en el que apareció el cuerpo, que serán analizados en el laboratorio.