La Policía Local de Calvià detuvo el pasado fin de semana a cuatro prostitutas que supuestamente asaltaban a turistas tras ofrecerles sexo. Una de ellas está acusada de haber sustraído una cartera con 700 euros en su interior a un extranjero, mientras las otras tres no pudieron llevar a cabo su propósito debido a la rápida actuación policial. Esta actuación se enmarca, según la Policía, en los controles que se efectuan para denunciar a aquellas mujeres que utilizan la vía pública para ejercer la prostitución.
En el primero de los robos, cometido de noche, participaron tres mujeres de origen subsahariano, según informó ayer la Policía Local. Las mujeres ofrecieron sexo a cambio de dinero a un turista. El hombre fue llevado a una zona oscura, donde una de las prostitutas le agarró con fuerza de los testículos mientras las otras dos se situaron detrás de la víctima y le registraron los bolsillos para arrebatarle el dinero que portaba.
En aquel momento, un vehículo policial que patrullaba por la zona advirtió lo que ocurrió y acudió a socorrer al turista. Dos de las agresoras emprendieron la huida al percatarse de la presencia de la Policía, mientras la tercera fue retenida por la víctima y detenida de inmediato. Las fugitivas fueron arrestadas minutos después al ser identificadas por otra patrulla. Las tres fueron llevadas a dependencias policiales.
El segundo robo se cometió el domingo de madrugada gracias a un modus operandi similar al anterior.
Un turista británico requirió, poco después de las dos de la madrugada, la presencia de la Policía tras percatarse de que le faltaba una cartera con 700 euros. Según explicó varias mujeres lo habían rodeado y, tras ofrecerle sexo le sustrajeron sus pertenencias. Una de ellas fue detenida.
La Policía Local de Calvià aseguró ayer en un comunicado que no se ha vuelto a detectar la presencia de prostitutas en las calles del municipio, gracias a los controles que se realizan con el objetivo de hacer cumplir las Ordenanzas de Policía y Buen Gobierno de la localidad, que impiden hacer uso de la vía pública para ejercer la prostitución.
