Andrés C.F., el conductor del camión que arrolló a dos mujeres, una de las cuales murió, cuando conducía ebrio en abril en el Paseo Marítimo de Palma, quedó en libertad el pasado viernes. El hombre, de 36 años, ha permanecido en prisión preventiva algo más de un mes. Sobre él siguen pesando los cargos de homicidio imprudente y lesiones graves. Según confesó ante el juez, la noche anterior al accidente había tomado varias cervezas y esnifado dos rayas de cocaína. La prueba de alcoholemia que se le efectuó tras el siniestro arrojó un resultado positivo.

El suceso ocurrió el pasado 24 de abril. El tráiler de un camión que descendía la cuesta de Peraires volcó sobre la calzada en el Paseo Marítimo y arrolló a dos mujeres, ambas de nacionalidad búlgara, que cruzaban un paso para peatones. Una de ellas, Roslada Ivanova, de 37 años, falleció en el acto al ser aplastada por el vehículo. La otra, Galabina Vasileva, de 30, sufrió lesiones muy graves y los médicos tuvieron que amputarle una pierna.

Varios testigos aseguraron a la Policía que el conductor del camión circulaba a una velocidad excesiva. El camionero negó este extremo y aseguró que intentó frenar antes de que el camión volcase. El hombre trabajaba habitualmente como conductor de la EMT y, desde hacia seis años, acudía por las mañanas a recoger camiones que llegaban al puerto de Palma para conducirlos hasta su destino.

Homicidio imprudente

Andrés C.F. explicó al juez de guardia que la noche anterior al siniestro había tomado cinco cervezas y esnifado cocaína. Aquella misma mañana, dijo, se tomó un carajillo. El juez ordenó su ingreso en prisión preventiva por dos delitos: homicidio imprudente y lesiones graves.

El pasado viernes, el titular del juzgado de instrucción número 9 de Palma, Enrique Morell, decretó la puesta en libertad del acusado, que ha permanecido en prisión preventiva durante un mes y una semana.