La tormenta provocó durante la madrugada dos averías en el tendido eléctrico de Mallorca, en las líneas de Galilea y Binissalem, que dejaron sin suministro a unos 4.000 abonados, según confirmaron fuentes de GESA.

La primera afectó a la zona de Galilea, Puigpunyent, sa Vileta y Son Roca; mientras que la segunda abarcó una zona rural y áreas industriales de Binissalem.

Fuentes de GESA explicaron que las averías se produjeron de madrugada y ayer por la mañana ya habían sido reparadas, por lo que los efectos sobre los perjuicios a los usuarios no habían sido graves. Los operarios de la compañía se mantenían en estado de alerta desde que comenzó la tormenta para solventar estas eventualidades.

El tendido eléctrico se vio afectado también por la gran cantidad de rayos que cayeron sobre Mallorca, aunque se trató de desconexiones automáticas de escasa duración.