El juzgado de lo penal número 1 de Palma condenó ayer a un hombre a penas de multa por tres faltas, dos de ellas por vejaciones y una de amenazas. La fiscalía solicitaba 20 meses de prisión por el exhibicionismo y el letrado de la acusación particular dos años de cárcel.

El fiscal rebajó en sus conclusiones la pena y el magistrado dictó sentencia 'in voce'.

Los hechos ocurrieron en la tarde del 22 de junio de 2003 en una finca de Llucmajor. El acusado declaró que salió del trabajo y fue a una caseta para dar de comer a los caballos. Al parecer, vio a un menor cerca de la verja y le recriminó que estuviera allí, debido a las desavenencias con la familia del chico, de unos 16 años de edad.

Él negó haberse exhibido desnudo delante del menor aunque la acusación mantuvo que se bajó los pantalones, enseñó los genitales al muchacho y le insultó.

El hombre señaló que al día siguiente se enteró de que la familia del chico le había denunciado ante la Guardia Civil de Llucmajor. El acusado mantuvo que todo se debía a los problemas que existen desde hace tiempo entre las dos familias.

Sin embargo, la madre del menor aseguró que, minutos después de estos hechos y una vez le habían pedido explicaciones de sus actos, pudo observar como el acusado se bajaba los pantalones y se exhibía desnudo delante de dos niñas.