Nuevo fenómeno natural en Mallorca: Las lluvias dejan un doble arcoíris en sa Pobla

Si bien ver un arcoíris sorprende por ser un espectáculo natural y bello, los vecinos de sa Pobla se han sorprendido a primera hora de la mañana por qué han podido observar un fenómeno menos frecuente, un arcoíris doble que se hacía presente sobre los campos de la localidad y que su longitud llegaba a otros pueblos vecinos, como Campanet. Dichos populares sobre el arco iris han surgido de la observación del tiempo.

Estas frases tradicionales relacionan la aparición de un arco iris a una hora específica del día con las condiciones meteorológicas que se esperan. Así las cosas, los payeses hoy recordaban este dicho: 'Si s'Arc de Sant Martí surt es dematí ens donarà bon cami i si surt es capvespre demà ferem festa'. Así las cosas, la sabiduría popular de antaño, basada en la atenta observación de los fenómenos naturales, dio origen a una rica tradición de dichos predictivos sobre el tiempo.

Mallorca en alerta amarilla: madrugada de lluvia y granizo en la Serra de Tramuntana

Estas frases concisas, transmitidas oralmente a lo largo de las generaciones, buscaban descifrar los patrones del clima a partir de señales cotidianas y en este caso del arco iris. Al analizar con detenimiento el comportamiento del cielo, nuestros antepasados elaboraban un sistema de creencias que les permitía anticipar las condiciones meteorológicas futuras, una habilidad crucial para la agricultura, tan característica de esta localidad, sa Pobla.

Estas expresiones lingüísticas, a menudo poéticas y memorables, encapsulan la experiencia acumulada de innumerables observaciones a lo largo del tiempo, ofreciendo una guía práctica para interpretar el lenguaje del entorno natural y prepararse para los cambios en el clima venideros. Si bien hoy en día ya no se utilizan para el trabajo de campo, los refranes siguen presentes.

¿Por qué se produce este fenómeno?

Los arcoíris dobles son uno de los espectáculos más fascinantes que nos ofrece la naturaleza. Este fenómeno óptico y meteorológico ocurre cuando la luz solar interactúa con gotas de agua suspendidas en la atmósfera, generando dos arcos concéntricos de colores.

El arco primario, más brillante y cercano al horizonte, se produce por una única reflexión interna de la luz en el interior de las gotas de lluvia. En él, los colores siguen el orden habitual: rojo en el borde exterior y violeta en el interior.

Por su parte, el arco secundario, más tenue y de mayor radio, se origina a partir de dos reflexiones internas de la luz dentro de las gotas. Esta doble reflexión no solo debilita la intensidad luminosa del segundo arco, sino que también invierte el orden de los colores, comenzando por el violeta en el exterior y finalizando con el rojo en el interior.

La aparición de un arcoíris doble requiere condiciones atmosféricas muy concretas. El sol debe situarse a baja altura y encontrarse a espaldas del observador, mientras que la lluvia o la niebla deben estar frente a él.