Sombras y pliegues | Nuestra piel necesita un plus de cuidados durante las fiestas navideñas

Todos esos excesos perjudican nuestra piel: alimentos más grasos y calóricos, productos con mucha azúcar (¡quien puede resistirse a los dulces navideños!) que provocan el deterioro de las fibras dérmicas y hace que ésta pierde su elasticidad y, por otro lado, el alcohol hace que nuestra piel se congestione, se deshidrate rápidamente y tenga un aspecto seco y apagado.

Ante este panorama, no es necesario entrar en pánico, tan sólo debemos aportar una serie de cuidados extras para no causar estragos en la piel y poder disfrutar de todos los pequeños placeres gastronómicos.

Limpiar la piel dos veces al día es algo que hacemos durante todo el año, aunque en esta época cobra más importancia y no debes, de ninguna de las maneras y por mucha pereza que te dé por haber trasnochado, irte a dormir con restos de maquillaje. Puedes limpiar tu piel con algo más de mimo (y profundidad) durante estos días y utilizar un limpiador purificante que hidrata, exfolia y alivia la piel al mismo tiempo y de forma muy suave como Pixi Limpiador purificante de venta en Sephora.

Lo primero que notaremos es la piel más deshidratada de lo habitual, por lo que debemos añadir un plus de hidratación a nuestra cosmética diaria. Puedes utilizar ampollas de hidratación concentradas como Uniqcure Intensive Hidrating Concentrate de Skeyndor, las Ampollas Revitalift Filler de L’Oreal o Advanced Night Repair Intensive Recovery Ampules de Estée Lauder.

Utiliza un serum rico en Vitamina C que estimulará la producción de colágeno y aportará un extra de luminosidad. La ampollas Splendor con vitamina C y ácido hialurónico de Bella Aurora aclaran, unifican, estimulan la producción de colágeno y además, tienen un efecto tensor inmediato.

Aplícate una mascarilla de miel por las noches (durante 10 o 15 minutos), después de desmaquillarte y antes de aplicar tu tratamiento, porque la miel es un humectante natural. Las encontrarás en sobres individuales para una sola aplicación como la Mascarilla nutritiva con miel y aceite de almendras de Nívea que, utilizada 2 o 3 veces a la semana, aportará un brillo especial a tu piel. Y si, al mismo tiempo, quieres limpiar toxinas puedes emplear la Mascarilla de miel y carbón de Origins, de venta en Sephora.

Por supuesto, aunque sea invierno, no te olvides de utilizar una crema con protección solar. Si aplicas todos estos extras de cuidado a tu piel, las fiestas navideñas y los excesos que las suelen acompañar, no causarán ningún estrago en tu piel.

Tus manos siempre perfectas

Las manos también envejecen y, más allá de las cremas de manos humectantes, existen multitud de tratamientos específicos para esa zona tan visible.

Establecer para ellas una rutina antienvejecimiento no es una idea descabellada si tenemos en cuenta que la piel de esta zona es más fina que la del rostro y está expuesta a todos los agentes externos perjudiciales, al que hay que añadir, el uso de los geles hidroalcoholicos que no han ayudado nada a un buen mantenimiento. 

Los cuidados más sencillos y fáciles consisten en utilizar los mismos productos de nuestra rutina facial y emplear el sobrante de cada aplicación (mañana y noche) sobre el dorso de las manos, sin olvidar un buen SPF cada mañana. 

Además, existen cuidados cosméticos específicos para las manos como la Crema de manos intensiva de Martidem que regenera las manos secas gracias al retinol y la caléndula. Utilizar cremas de manos con retinol acelera la renovación celular por la noche y evita que aparezcan manchas y, durante el día, puedes emplear una crema redensificante y alisadora como Le lift de Chanel. Si además añades tus mascarillas faciales sobre el dorso de tus manos, el resultado será espectacular.