Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cita climática

Sharm el-Sheikh confía en que la cita del G20 logre desatascar la cumbre del clima

El primer esbozo de los acuerdos de la cumbre egipcia sorprende por sus lagunas

Un policía egipcio frente al Centro Internacional de Congresos durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP27 en Sharm El-Sheikh. EFE

Las negociaciones de la cumbre del clima siguen atascadas mientras se acerca la recta final del encuentro. Tras más de una semana de debate, y en un momento en que ya deberían empezar a esbozarse los primeros compromisos políticos, todo parece estar aún en el aire. Y es aquí donde Sharm el-Sheikh, epicentro de estas conversaciones climáticas, mira hacia Bali, punto de encuentro de la cumbre del G20, que se celebra entre hoy y mañana, para intentar desatascar el embrollo. Si las conversaciones indonesias consiguen plasmar un compromiso firme en materia climática, es posible que el debate egipcio reciba un nuevo empujón. 

En la cumbre de Bali, todas las miradas están puestas sobre el presidente estadounidense, Joe Biden, y su homólogo chino, Xi Jinping. El año pasado, en la cumbre de Glasgow, Estados Unidos y China anunciaron el primer acuerdo de colaboración de la historia de sus países para "acelererar la lucha contra la crisis climática". El pacto se convirtió rápidamente en una de las noticias más sonadas de la cumbre pero, pese al frenesí inicial, el compromiso apenas ha cristalizado. Sobre todo por la reciente crisis diplomática entre estos dos países. Ahora, la gran esperanza es que Bali sirva para reconciliar posturas. Por el momento, según ha trascendido, Biden y Xi se han mostrado dispuestos a "reabrir las conversaciones" en materia climática. 

El G20 podría desbloquear las conversaciones de la cumbre del clima si, por ejemplo, en su declaración final recoge de forma explícita el compromiso de las grandes potencias del globo para "aumentar su ambición" para hacer frente a la crisis climática. O para tomar más medidas para limitar el calentamiento global por debajo de los 1,5 grados de media. "Si la cumbre de Bali concluye sin ninguna mención a las políticas climáticas, será muy complicado defender políticas más ambiciosas desde Egipto", afirma un diplomático presente en las negociaciones de la cumbre egipcia. 

Primer borrador

Mientras, en Sharm el-Sheikh, todo avanza al ralentí. El primer borrador de los compromisos de la cumbre del clima ha llegado con varios días de retraso, es mucho más escueto de lo esperado y, en general, es más un reflejo de "promesas climáticas" que de acuerdos concretos. El primer 'draft' de las negociaciones, publicado en el arranque de la segunda y última semana del debate, recoge (una vez más) el compromiso de los países para limitar el aumento global de las temperaturas, la necesidad de acelerar la transición hacia las energías renovables y la voluntad de aumentar los fondos para los planes de adaptación climática. El cómo conseguirlo es lo que no se detalla.

Tras más de una semana de negociaciones y una larga espera, la publicación de este escueto borrador destaca más por sus ausencias que por sus logros. El ejemplo más claro es el caso de los combustibles fósiles. El año pasado, Glasgow logró por primera vez en la historia incluir una referencia explícita sobre la necesidad de reducir el uso del petróleo, gas y carbón en su declaración final. La mención, que acabó siendo rebajada a último momento, ha desaparecido en los borradores de Sharm el-Sheikh. El documento no dedica ni siquiera una línea a hablar sobre la necesidad de reducir las explotaciones de combustibles que, según destacan innumerables informes científicos, han desencadenado el calentamiento global y están acelerando el avance de la crisis climática. 

La otra gran ausencia que crea inquietud tiene que ver con el mecanismo para financiar pérdidas y daños causados por la crisis climática. Sharm el-Sheikh ha logrado que, por primera vez en la historia de este tipo de encuentros, este debate se incluyera en la agenda oficial de negociaciones. El primer borrador de los acuerdos constata que, efectivamente, el tema ha estado sobre la mesa. Eso sí, no concreta nada sobre su posible resolución. Según un documento trascendido el pasado lunes, una de las opciones sobre la mesa sería la creación de un fondo gestionado (o supervisado, según se mire) por Naciones Unidas. No está claro si esta opción saldrá adelante o si, por el contrario, se apostará por una fórmula diferente. 

Compartir el artículo

stats