Un juzgado madrileño ha ordenado el ingreso en prisión de la expresidenta de Infancia Libre María Sevilla, que fue condenada por sustracción de menores, tras rechazar su recurso al estimar que no se ha arrepentido y, además, tiene otro procedimiento judicial en marcha.

Fuentes jurídicas han confirmado a Efe que el Juzgado de lo Penal número 2 de Madrid ha denegado la suspensión de entrada en prisión que solicitó María Sevilla hasta que se resuelva el indulto que han solicitado varias asociaciones de mujeres.

Hace un año la Audiencia Provincial de Madrid confirmó la condena a la expresidenta de Infancia Libre a dos años y cuatro meses de prisión por sustracción de su hijo y la retirada de la patria potestad durante cuatro años.

Los magistrados de la Audiencia Provincial consideraron probado que la condenada, desoyendo el contenido de órdenes judiciales, se llevó a su hijo menor "a fin de evitar que el padre ejerciera su legítimo derecho de guarda y custodia" y "no solo se negó a entregarlo voluntariamente, sino que se lo llevó en un periplo que acabó con la intervención policial".

El Supremo no admitió el posterior recurso presentado por la defensa de María Sevilla, que finalmente solicitó el indulto en diciembre del pasado año.

Ahora el juzgado encargado de ejecutar la pena ha desestimado la petición de no entrar en prisión porque Sevilla "no ha mostrado arrepentimiento alguno", detallan las fuentes.

El auto añade que María Sevilla tiene en marcha otro procedimiento judicial que, según las fuentes consultadas por Efe, versa sobre una supuesta estafa documental por presentar un informe médico falso en la causa en la que fue condenada por secuestrar a su hijo.

Por eso, la cita para este martes con el fin de que recoja el mandamiento de entrada en prisión, momento desde el que tendrá diez días para hacerlo.

María Sevilla fue detenida el 30 de marzo de 2019 en una finca de Villar de Cañas (Cuenca) por la Policía Nacional por un presunto delito de sustracción de menores tras incumplir una sentencia que otorgaba la custodia al padre de su hijo y mantenerle aislado y sin escolarizar durante un año.

Sevilla era expresidenta de Infancia Libre, asociación que la Policía investigó para determinar si se trata de una organización criminal dedicada a presentar denuncias falsas por abuso sexual, lo que fue descartado por la Fiscalía.