Tras la caída del videoclub Piscis, el Universal es el último establecimiento de Palma de este tipo que acaba de echar el cierre.

El local de la calle Simó Ballester abrió hace 37 años y su dueño lo ha vaciado para trasladar todo lo que quedaba en su interior a un almacén. Las existencias que le quedan las vende por internet y también en el mercadillo de Consell.

Hace un año que el videoclub Piscis, en la calle Manacor, echó la persiana. El establecimiento aguantó todo tipo de crisis: desde la irrupción de la televisión privada a la embestida de las plataformas. Sin embargo, fue la pandemia la que le dio el golpe de gracia.

En el momento de la entrevista con este periódico al propietario del Piscis, explicó que todavía quedaban en Palma Acción del Molinar, que también es despacho de lotería, y el Universal, que es el que acaba de echar el cierre. «Creo que queda otro en Llucmajor. El Chaplin, de Eivissa, es ahora tienda de merchandising de cine y creo que le va bien», comentó.