La ex modelo canadiense Linda Evangelista ha viralizado a través de su cuenta de Instagram que está «totalmente deformada» debido a una intervención fallida de cirugía estética que se realizó hace cinco años y de cuyos riesgos nunca fue advertida. Sumida en una profunda depresión, la maniquí presentó una demanda el pasado martes en un tribunal federal de Nueva York contra Zeltiq Aesthetics por negligencia y publicidad engañosa.

La demanda, que asciende a 50 millones de dólares, alega pérdida de ingresos por no poder trabajar desde 2016 y angustia emocional. En la denuncia, se explica que la modelo se ha sometido a múltiples procedimientos entre 2015 y 2016 para reducir la grasa en sus muslos, abdomen, espalda, costados y barbilla, y que la cirugía correctiva no funcionó.

La duda ahora sería considerar si su aspecto actual se debe a una negligencia médica o a la no aceptación de que las mujeres envejecen y la apariencia puede verse afectada por la edad o factores como la menopausia. Evangelista también afirmó que su fisonomía hoy en día es resultado de una condición llamada hiperplasia adiposa paradójica, y es la principal razón por la que se mantiene fuera de la esfera pública. «Lo hago saber para que mis seguidores, que se han preguntado por qué no estoy trabajando mientras las carreras de mis compañeros han prosperado, les diré que la razón es que fui brutalmente desfigurada por el procedimiento CoolSculpting de Zeltiq, que hizo lo contrario de lo que prometía», escribió la modelo en su cuenta de Instagram. «Aumentaron mis células de grasa en lugar de disminuir y quedé permanentemente deformada, incluso después de someterme a dos dolorosas e infructuosas cirugías correctivas. He quedado, como describen los medios de comunicación, irreconocible», añadió. 

Las secuelas del procedimiento estético

Este diario ha consultado con diversos doctores de medicina estética en Palma sobre la técnica y lo que ha podido suceder para que la modelo haya obtenido tan mal resultado.

La doctora Dagné Pupo, desde su consulta de Medicina Estética de la Policlínica Miramar Juaneda, explica: «CoolSculpting es un tratamiento seguro e ideal para la grasa localizada, congela las células grasas, eliminando eficazmente la grasa no deseada en el área tratada con resultados increíbles. Los efectos adversos son poco frecuentes pero posibles en todos los tratamientos médicos. Es un punto que olvidamos como pacientes, antes de cualquier tratamiento se informa mediante un consentimiento de los diferentes efectos adversos que podemos tener. Existen efectos secundarios leves y temporales como enrojecimiento, hinchazón, hematomas, hormigueo, escozor, sensibilidad, calambres, dolor, picazón o sensibilidad en la piel. Los efectos secundarios raros también incluyen congelación, hernia, mareos o dolor que pueden durar una semana. La hiperplasia adiposa paradójica es un efecto secundario muy poco común, en lugar de causar que la grasa desaparezca, hace que crezca. Fue descrito por primera vez por científicos en el 2008. Se desconoce exactamente por qué sucede. En cualquier, es un procedimiento para tratar grasa localizada, nunca el exceso de peso corporal. En nuestra consulta tenemos otros métodos mínimamente invasivos como la intralipoterapia».

Linda Evangelista antes de someterse al tratamiento ‘CoolSculpting’. |

Linda Evangelista antes de someterse al tratamiento ‘CoolSculpting’. | INSTAGRAM

El doctor Antonio Ruiz Nadal, vicepresidente de la Sociedad Balear de Cirugía Plástica, alude por su parte que «en cuanto a la polémica suscitada por el caso de Linda Evangelista, habría que considerar que cualquier tratamiento médico o quirúrgico está sujeto a un porcentaje de complicaciones. Hasta tomar una aspirina puede desatar una reacción alérgica que desemboque en una muerte repentina. En este caso, ni la cirugía ni la medicina estética tratan sobrepeso, apenas deben actuar sobre la grasa localizada. Hay que huir de las mal llamadas lipoesculturas o de tratamientos mágicos que nos prometen eliminar el exceso de grasa generalizada sin realizar dieta. Por otra parte, los tratamientos quirúrgicos pueden generar más respeto, pero son infinitamente más efectivos que cualquier otro (radiofrecuencia, ultrasonidos, criolipolisis, etc.) y se realizan en un entorno más adecuado y por personal médico. Los tratamientos realizados con aparatología que desprende energía, frío, calor, etc., tienen más probabilidad de producir quemaduras e irregularidades en la superficie cutánea y necrosis y exceso de tejido fibroso o cicatricial en la profundidad. Muchas veces se sobreindican y en esta tentativa de corregir grandes volúmenes se usan grandes cantidades de energía que desembocan en estos resultados. Debemos acudir a profesionales con la titulación adecuada. Las liposucciones son cirugías y deberían ser siempre realizadas por cirujanos plásticos. Casos como el de Linda Evangelista demuestran que algunos tratamientos están mal indicados y además realizados por personal poco competente, aunque honestamente dudo mucho que el aspecto actual de la exmodelo se deba únicamente a un tratamiento con criolipólisis y sí a un estilo de vida algo desordenado».

Por último, la doctora Cristina Núñez de Clínica Áureo insiste como los anteriores en que «el tratamiento de criolipólisis es efectivo únicamente para localizaciones en las que la grasa se acumula de manera inestética, siendo un tratamiento no invasivo. Es un procedimiento con base y literatura científica, y aprobado por la FDA. Como cualquier otro tratamiento médico puede tener sus complicaciones y una de ellas es la hiperplasia adiposa paradójica, una complicación muy rara (según fabricante se da en un 0,025%, aunque un reciente estudio independiente la sitúa en un 0,72% que sigue siendo una probabilidad bajísima). En palabras no médicas, podríamos decir que lo que pasa en la hiperplasia adiposa paradójica es que el depósito que tratamos en vez de eliminarse se endurece y queda más marcado y visible. La solución es quirúrgica, es decir, hay que esperar a que esa grasa se ablande y después extraerla por liposucción. Por norma, con esta operación se soluciona esa posible complicación. Existen alternativas como la cirugía, que siempre es la más resolutiva, pero también otras poco invasivas. Lo más importante es el diagnóstico realizado por un profesional experto en Medicina Estética y que siempre debe valorarse que la idiosincrasia de cada paciente va a influir en el resultado final y en sus posibles complicaciones. Además, todo procedimiento médico puede tener unos efectos adversos para los cuáles el profesional debe estar formado y preparado para responder y tratar».