El pleno viaje inaugural, el megayate Nord, propiedad del magnate ruso Alexei Mordashov, la cuarta fortuna del país, deslumbra en Puerto Portals, con sus 142 metros de eslora, sus seis cubiertas de estructura piramidal, sus 10.000 toneladas de desplazamiento y sus dos espectaculares helipuertos en la cubierta de proa y en la superior, resguardado en un hangar de cubierta retráctil.
El yate más moderno del mundo, valorado en 500 millones de dólares y con un mantenimiento anual que oscila entre los 40 y los 50 millones de dólares, fue diseñado con un objetivo único: causar emociones fuertes en cada observador, no solo por su tamaño, sino por el diseño en sí. "Nadie debe quedar indiferente ante él", ha declarado su diseñador, Dan Lennard, del estudio italiano Nuvolari- Lenard, a la revista especializada Superyatch Times: "Te guste o no el diseño, debe sorprenderte. El Nord es un barco ante todo, pero también trasciende el lenguaje tradicional del diseño de yates. Es un buque de guerra con esmoquin, un explorador con la elegancia de un caballero. Hemos abierto una nueva dirección en el diseño de yates ", ha asegurado.
Fondeado junto al dique de Puerto Portals desde el miércoles a la ocho de la mañana, donde causa sensación entre los ciudadanos que pasean por el dique, el Nord llegó a la isla procedente de Cartagena y Puerto Banús. Como anécdota el pasado domingo se vio obligado a buscar refugio en la ensenada del puerto malagueño a consecuencia del mal tiempo.
"Es un buque de guerra con esmoquin, un explorador con la elegancia de un caballero. Hemos abierto una nueva dirección en el diseño de yates ", ha asegurado su diseñador, Dan Lennard
El Nord está dotado con estabilizadores de velocidad, gimnasio, ascensor, piscina, sala de cine, hangares para lanchas auxiliares, plataforma de baño, aire acondicionado, zona de barbacoa, club de playa, sala de spa, sauna, luces subacuáticas y un salón de belleza. Pero eso no es todo, su dotación va mucho más allá e incluye también un gran centro deportivo y de buceo en la cubierta inferior, una piscina de gran tamaño en la cubierta principal y una flota de 14 embarcaciones personalizadas que incluyen dos Windy SR52 Blackbirds modificados. También lleva un submarino para realizar exploraciones subacuáticas. El buque puede acomodar a puede acomodar hasta 36 invitados en 20 habitaciones.
Tras cuatro años de construcción en los astilleros Lürssen, el buque abandonó Alemania durante la primera semana de febrero y ahora está realizando su viaje inaugural, una vez entregado a su propietario, que cuenta con intereses en los sectores de la energía, la metalurgía y la minería y cuenta con una fortuna estimada de 20.500 millones de dólares.
