David Deibis está entusiasmado con la victoria de la sudafricana Zozibini Tunzi como nueva Miss Universo. "Una chica negra, sin maquillaje, pelo rapado. Cuando la vi, me paré a aplaudir. Qué maravilla. Esto es el futuro", comenta a este diario el maquillador de celebridades como Nicole Kidman o Salma Hayek. El profesional de la belleza cerró ayer en Palma su tour 2019 con una masterclass de automaquillaje en la Clínica Marisol Galano de Ciutat. Un taller en el que participaron unas 15 personas.

El venezolano es partidario de la belleza natural. Y del cuidado de la piel, "incluso antes que el maquillaje". "Ahora estoy en la línea del no make up", confiesa. "Las mujeres más importantes del mundo que me ha tocado y me toca maquillar como clientas, si me solicitan, es porque quieren verse como son ellas. Que la gente en la calle las vea como son. Si tú a una mujer a través del maquillaje la haces distinta, ya va a perder personalidad. Y eso no me gusta. En mis trabajos siempre vas a ver muchos tipos de mujer, pero en ellos va a prevalecer la naturalidad".

Deibis está inmerso en el lanzamiento de su nuevo libro (saldrá en enero). "No es un volumen al uso de técnicas de maquillaje. Es un libro que está autorizado por todas mis celebrities. Hablo un poco sobre los mitos del maquillaje, para romper tanta historia con la que nos han invadido los influencers, instagramers, YouTube, etc. Yo sigo confiando en mí porque mi escuela ha sido la vida. Yo confío en la realidad", confiesa.

El maquillador cuenta que por sus brochas ya han pasado las más grandes de España [guarda silencio por los contratos de confidencialidad, asegura]. "Sólo me queda un objetivo que me encanta: Rossy de Palma".