Manacor acogió ayer un encuentro de dobles mixtos digno de Roland Garros. Se enfrentaban los Nadal-Perelló y los Borbón-Grecia, por orden de poderío. La relación entre Juan Carlos Primero y Rafael Primerísimo es paternofilial. Estas parejas solo coinciden prácticamente con motivo del tenis, una distancia que garantiza la longevidad salutífera de ambas relaciones. Y quien no esté de acuerdo con la jerarquía aquí establecida entre el tenista y el monarca, debe preguntarse si invitaría a cenar antes al Rey o a Don Juan Carlos.