El actor norteamericano Michael Douglas puso fin ayer a sus magníficas vacaciones en la isla, pero no lo ha hecho sólo, sino acompañado de su mujer, Catherine Zeta-Jones y de su hijo Dylan.

La familia lleva eligiendo Mallorca como destino desde hace ya 30 años, ya que hace justamente ese periodo de tiempo que el célebre actor se asentó en la finca de s'Estaca, que compró con su anterior esposa Diandra Luker y que actualmente se encuentra en venta.

Douglas no ha dudado a la hora de subir a la red social Instagram un selfie con el paisaje mallorquín durante su última mañana en la isla. Una foto con la que, poniendo 'morritos' y bajo el título de 'Buenos días Mallorca', se despide de unos días únicos con su familia.