Muchos ¿por qué no? la llevaron a encontrar su propio estilo dentro del mundo de la ilustración, aunque su formación sea en diseño gráfico. Es gallega, aunque lleva por aquí tanto por Mallorca que le ha dado tiempo a formar una familia. Es durante este proceso que implica "tantos cambios, reestructuración y calma" que poco a poco fue dándose cuenta de "lo que podía hacer y lo que quería hacer". Es Eva Hermida, y su ilusión es su proyecto, que lleva su mismo nombre y es igual de alegre y colorido que ella.

Corría el año 2016, cuando le surgió la oportunidad de realizar una colección de los dimonis -de la mano de Carme Castells y el proyecto Mil Dimonis-, lo que la empujó a continuar con la ilustración. Eva ya llevaba más de diez años trabajando en el ámbito del diseño gráfico y, si bien la ilustración siempre "estaba ahí", no tenía un estilo que le identificara. Trabajó en ello y lo encontró. Y los dibujos de estos dimonis, hechos con ordenador, se convirtieron, primero, en chapas, luego en imanes, y más adelante en tazas, cuadernos y láminas. Con lo de los dimonis, luego se animó a dibujar también caparrots y otros elementos de la cultura popular.

Sí, ese fue uno de los momentos en qué se dijo a sí misma ¿por qué no?. Así que decidió probar con la ilustración personalizada. "Esto es algo que funciona muy bien con el boca a boca. Lo típico: hacer algunos para tus amistades y gente más cercana y la gente te empieza a preguntar", explica. El siguiente por qué no fue: ¿Y por qué no dibujar celebrities? Llámenlo celebrities, llámenlo referentes o figuras relevantes del mundo de la música o el cine. Audrey Hepburn, Bowie, Alaska, Amelie, Freddie Mercury... "Estudio mucho al personaje para extraer sus elementos más significativos con el objetivo de que se puedan distinguir claramente", relata Eva sobre el proceso creativo. La diferencia entre los encargos de ilustraciones personalizadas y el hecho de dibujar a sus referentes es, precisamente, la libertad. "Normalmente te hacen un encargo a ti porque les gusta tu estilo, pero siempre hay algo que cambiarían o que quieren diferente. Cuando realizas tus propios proyectos eres tú la que decide cada paso y cómo serán todos los elementos", confiesa Eva.

Define su estilo como aniñado: "Los más pequeños siempre piensan que todos los dibujos son niñas, a no ser que esté muy claro que no lo son", dice. Además, es colorista -"antes era un poco más pastel, ahora los colores son más vivos y saturados"-. En definitiva, "soy muy naif", sentencia.

Aunque ahora está en un momento de parón, afirma que "mi ilusión es esta". Sus objetivos son "que todos los municipios tengan representación de sus dimonis", que sus dibujos se conviertan en juguetes en 3D, iniciarse en la ilustración de cuentos y hacer juegos con sus personajes... ¡Nada menos!