Los ciudadanos de Balears siguen a la cola en comparación con el resto de comunidades autónomas a la hora de comprar décimos de lotería para el sorteo de Navidad, aunque los administradores de Palma afirman que han notado un ligero aumento en la venta de billetes respecto al año pasado. Las terminaciones más solicitadas no experimentan cambios, siendo las de 13, 15 y 18 las más pedidas. Quienes más gastan son los turistas nacionales y se prefiere el décimo físico, el de toda la vida, al obtenido por terminal.

"Hasta la fecha hemos registrado un aumento de ventas de décimos en torno al 5 por ciento respecto a 2017. Los mallorquines podrán jugar poco pero en el sorteo de Navidad todos juegan, grandes y pequeños, a título particular o con su empresa, ya sea con un décimo, medio décimo o una participación", señala Pepe Alemany, responsable de la Administración número 9 de Palma, la de la Plaça Porta Pintada.

Las colas que se vieron ayer en algunas administraciones de Ciutat han provocado que algunos loteros se froten las manos. Es el caso de la Administración número 2, la de Alcampo, donde María del Carmen Feliu, la responsable, y Herminia Sánchez, la encargada, también aseguran que las ventas se han incrementado. "Aun faltan los últimos días, y son muchos los que lo dejan para el final. A mucha gente le gusta ser rezagada, esperar hasta el último momento, y buscar esos que llaman números feos o raros".

Los acabados en números impar y las terminaciones en 17, 19 y 18, por corresponder a este año, 2018, son los décimos más pedidos por los supersticiosos. El 13 merece un capítulo aparte. "Es la terminación más pedida y es el único que no se puede pedir por máquina", apunta Sánchez.

El 91018 -imposible de hallar en la isla-, la fecha de la tragedia del Llevant, y el 00155, relativo al artículo de la Constitución que se aplicó en Cataluña, también están entre los décimos de culto.

Las personas más mayores son las que más juegan en el sorteo del Gordo, y también son los que más "indignados" están con lo que se lleva Hacienda en impuestos de la lotería, y eso que este año se pagarán menos debido a una reforma en la ley.

"En nuestro caso los turistas sí juegan, pero es que nuestra administración, la número 6, la de la Avinguda d'Alexandre Rosselló, es muy céntrica", aclara el hijo del administrador, Roberto Aguiló. "Quienes más juegan son los alemanes, y también los turistas nacionales. Ha habido casos de llamadas desde un pueblecito recóndito de la Península que querían un número concreto que se les había cruzado en sus cabezas", añade.

"Los mallorquines -continúa este lotero- jugamos muy poco. La de la lotería es una tradición más arraigada en los bares de la, digamos, España profunda".

"En Mallorca hay afición a traerse los décimos de Madrid o Barcelona. Jugamos poco en la isla pero aunque la venta para Navidad no ha sido desorbitante, sí es cierto que hemos notado un ligero aumento de ventas", concluye Eduardo Masana, de la Administración número 23.

Balears, a la cola en gasto de lotería de navidad

Los baleares gastaron 38,24 euros en comprar décimos de lotería en la pasada Navidad siendo la comunidad autónoma con menor gasto por habitante, aunque fue aún menos el que se hizo en la ciudades de Melilla (13,36) y Ceuta (13,96) según datos de la Agrupación Nacional de Asociaciones Provinciales de Administradores de Lotería (Anapal).