El histórico director y guionista Antonio Mercero, Goya de Honor en 2010 y creador de hitos televisivos como las series Verano azul y Farmacia de guardia, falleció en Madrid a los 82 años.

Mercero (Lasarte, Gipuzkoa, 1936), el único español ganador de un premio Emmy como director por su trabajo en la película La cabina (1972), padecía alzheimer desde el año 2009.

Su dilatada carrera empezó en Madrid, como ayudante de dirección de Jorge Grau y Herald Reinl hasta su debut en solitario, con el cortometraje Lección de arte (1962), que obtuvo la Concha de Oro de San Sebastián.

Tras un tiempo dedicado a guiones y publicidad, rodó cortos como La balada de los cuatro jinetes (1969), que le brindó la Espiga de Oro del Festival de Valladolid, y entró a trabajar en Televisión Española, primero en documentales y después en conocidas series. Entre ellas, además de Verano azul, están Crónicas de un pueblo (1971) y Turno de oficio (1986). Fuera de TVE, Mercero firmó otra serie de enorme éxito y por la cual recibió diversos galardones, Farmacia de guardia (1991-1995), que emitió Antena 3 al igual que su adaptación de Manolito Gafotas (2004).

La cabina

Uno de sus trabajos más reconocidos fue la película de La cabina, un mediometraje cuyo guión escribió junto a José Luis Garci que fue muy aplaudido y cosechó, además del Emmy que concede la Academia de Artes y Ciencias de la Televisión de EE UU, el premio de la Crítica Internacional de Montecarlo y el Premio Marconi en Milán. En la trayectoria de Mercero también destacan muchas otras películas. Una de las últimas, Cuarta planta (2003), consiguió los premios al mejor director y del público en el Festival de Montreal. Años después, en ¿Y tú quién eres? (2007), Mercero abordó precisamente la enfermedad de Alzhéimer.

También fue presidente de la Academia de las Ciencias y Artes de Televisión entre 1998 y 2000. En su larga trayectoria fue distinguido, entre otros, con el Premio Ondas de televisión (1992) y la Medalla de Oro a las Bellas Artes (1997). Enfermo de Alzheimer desde 2009, en diciembre de ese año recibió en su domicilio el Goya de Honor de manos del entonces presidente de la Academia de Cine, Álex de la Iglesia, quien resaltó su “inmejorable carrera cinematográfica”.