El Lady Moura es un yate muy conocido en la bahía de Palma, dado que durante varios años estuvo largas temporadas atracado en el Club de Mar, resultando su silueta muy familiar a todo el que se acercara por allí.
Cuando entró en servicio era uno de los barcos de su clase más grandes del mundo, hoy día con el boom de la construcción de megayates, y a pesar de sus 105 metros de eslora, ocupa la posición 32 entre los más grandes y con tendencia a bajar aún más en la lista.
El Lady Moura fue construido en los astilleros alemanes de Blohm & Voss en Hamburgo, siendo entregado en noviembre de 1990. La parte de ingeniería correspondió al propio astillero, mientras que el diseño tanto exterior como interior fue obra de Luigi Sturchio. Su propietario es el magnate de Arabia Saudí, Nasser Al Rashid, y se dice que costó de 180 millones de dólares de la época, como también se dice que las letras doradas de su nombre que lleva en el casco son de oro de 24 quilates, pero es difícil saber hasta qué punto es verdad.
La nave como todas las de su categoría va dotada de todo tipo de comodidades y equipamientos, así en sus siete cubiertas podemos encontrar un spa, pista para helicóptero, casino, discoteca y hasta un quirófano, así como una zona que facilita el almacenamiento y uso de todo tipo de artilugios utilizados para la práctica de cualquier tipo de deporte náutico. Destaca también su sistema de estabilización automático cuando está fondeado, que reduce ostensiblemente los movimientos del barco.
Sus dimensiones son: eslora, 105 metros; manga, 18,5 metros; calado, 5,5 y 6.359 toneladas de registro. Para la propulsión dispone de dos motores MWM con una potencia total de 10.100 kW que le imprimen una velocidad de hasta 20 nudos, disponiendo de hélices de paso variable y de hélice transversal a proa para facilitar las maniobras. Puede llevar treinta invitados y la tripulación la componen sesenta miembros.
El Lady Moura fue reformado en el 2007 y hace solo unos meses que ha vuelto a pasar por astilleros alemanes.
Su dueño es Nasser Al Rashid un magnate saudí, fundador de Rashid Engineering, una empresa de ingeniería que ha realizado importantes proyectos en su país.
En su historial hay que contabilizar una varada, ocurrió en mayo del 2007, en Cannes, durante el desarrollo del festival de cine. Parece que al fondear cerca de Port Canto y debido a que alrededor había multitud de pequeñas embarcaciones que dificultaban su maniobra, tocó una aguja rocosa, que le produjo algunos daños en el casco, debiendo ser ayudado por un remolcador para salir de esta situación. Los daños fueron posteriormente reparados en Barcelona.
En sus primeros años invernaba y pasaba largas temporadas en Mallorca y era bastante habitual ver su inconfundible imagen al pasar por el Paseo Marítimo. En los últimos años visita Palma, pero no como antes, de hecho, este año se le ha visto muy poco, después de su estancia en los astilleros en Hamburgo, pasó fugazmente camino a Chipre. Últimamente ha estado en aguas italianas y francesas. Actualmente está atracado en Mónaco, aunque en cualquier momento se le puede volver a ver por aquí.
