Trece parejas y cinco personas a título individual, la mayoría estudiantes de la Escola d´Art i Superior de Disseny de les Illes Balears, concurrieron ayer en la Marató de Reciclatge Creatiu de Roba. Una cita que en su tercera edición se trasladó al Centre Flassaders y que como en años anteriores se marcó un objetivo: aumentar la sensibilización ciudadana y de los nuevos diseñadores sobre la problemática de los residuos textiles.

La maratón tuvo una duración de nueve horas, tiempo en el que los participantes tuvieron que diseñar, en un derroche de imaginación y creatividad, piezas de vestuario únicamente a partir de la recogida selectiva. A las nueve de la mañana, los aspirantes a los premios del certamen -cuyo fallo se anunciará el próximo martes en la Escola d´Art i Superior de Disseny- fueron recibidos por la consellera de Medi Ambient, Sandre Espeja; la directora general de la Fundació Deixalles, Francesca Martí; la vicedirectora de la Escola d´Art i Disseny, Margalida Canet; y la directora insular de Residus del Consell, Catalina Maria Canals. En juego, 600 euros para el ganador, 300 para el segundo clasificado y una noche para seis personas en un refugio del Consell, para el tercero de la maratón.

Los diseñadores, estudiantes y aficionados, eligieron sus prendas de entre 500 kilos de ropa que fueron depositados en la segunda planta de Flassaders. Una "montaña de ropa" de la que salieron desde zapatos a sombreros, incluso un vestido de novia, el elegido por María Redondo y su hija, Lorena Sánchez. "Me gusta ponerme retos relacionados con el reciclaje, cada vez con más presencia en la sociedad. Basta con ver la cantidad de tutoriales para reciclar ropa vieja que hay en internet", comentó Sánchez, presente en las tres ediciones de esta maratón, una de las veteranas junto a Esperanza Martínez y Patricia Pelaires.

"Es una prueba que merece la pena por su mensaje", afirmaron Sara Bauzà y Neus Guillén.

"Este tipo de concursos son oportunidades para realizarnos como diseñadoras", aseguró la estudiante de moda Mónica Matanza. "Estamos aquí para dar lo mejor de nosotras y disfrutar, en ningún momento queremos agobiarnos", añadió Daniela Gómez.

Como novedad, el jurado, en el que además de representantes de las instituciones y centros antes citados figuran dos diseñadoras, Verónica Solivellas y Gloria Lorente, valorará este año no solo el resultado global del trabajo, sino el grado de aprovechamiento real que se hizo de las piezas de ropa seleccionadas para crear el diseño. La fecha más esperada, el martes 14 de marzo, a partir de las 12.30 horas, en la Escola d´Art i Superior de Disseny.