El cielo de febrero reserva deslumbrantes constelaciones

Aprovechando que las tormentas han dado una tregua, un buen plan para los próximos fines de semana, bien abrigados, es contemplar el brillante manto ignorado que llamamos cielo y que muestra lucientes lunares a nuestros ojos. Un experto en la materia es el presidente del Institut Mallorquí de Ciències de l'Espai (IMCE), Lluc Mas Pocoví, quien ayer sorprendió en la conferencia que ofreció en el Club de este diario relacionando algunos de los refranes populares de la cultura mallorquina con la astronomía, además de explicar qué reserva la noche para este mes de febrero.

"Explicado desde un punto de vista astronómico -respaldado por cuidadosos gráficos-, se observa cómo la Luna de medianoche durante enero se encuentra a la misma altura que el Sol al mediodía durante el solsticio de verano, lo que explica su visibilidad y brillantez", demostró Mas Pocoví.

Durante este mes y el siguiente, y contemplando hacia ponente, Venus también resalta más que el resto del año si "se observa durante la puesta de Sol, incluso antes. Al estar a una magnitud -4,4, se expone como un farol enorme", detalló el presidente.

Los cielos de invierno ofrecen un espectáculo único con, por ejemplo, la constelación de Orión, fácilmente reconocible por "las Tres Marías" o "Los tres Reyes Magos", que conforman la cintura de 'el Cazador'; o la Alfa del Can Mayor.

Pero poco a poco la luz solar se va adueñando de las horas y refranes como "Por Sant Sebastián, una hora más de día hay" están apoyados por la ciencia. "Haciendo un estudio del incremento de la claridad a partir de los amaneceres y atardeceres, se percibe un incremento de un minuto por día desde el solsticio de invierno, lo que significa que hasta Sant Sebastià es un mes, y por tanto, el dicho es cierto", aseguró.