El juez de la Seu d'Urgell (Lleida) del caso de Nadia Nerea, la niña con tricotiodistrofia cuyos progenitores están siendo investigados por presunta estafa en la recaudación de fondos para un tratamiento médico, ha fijado una fianza solidaria de responsabilidad civil para el padre y la madre de 1,2 millones y ha confirmado en dos autos la prisión provisional para el padre y la suspensión de la patria potestad para la madre.

El instructor ha fijado una fianza solidaria de 1.224.968,19 euros para ambos y si no la abonan se procederá al embargo bienes, ha informado este jueves la Fiscalía.

Por su parte, el abogado de los padres, Alberto Martín ha adelantado a Europa Press su intención de recurrir la fianza argumentando que es elevada: "La fianza es elevada, en la reclamación civil tenemos dos denunciantes personados y entre los dos no suman 20.000 euros", ha asegurado el letrado.

Según sus datos, los dos denunciantes particulares son una persona que aportó 6.000 euros cuatro días antes de la detención y el Grupo Inversor para el Desarrollo que hizo dos aportaciones, una de 10.000 euros y otra de 3.500.

El padre de la niña, Fernando Blanco, fue detenido en la Seu d'Urgell (Lleida) huyendo de un control policial en la comarca de la Cerdanya, y al ser arrestado se le encontró una pistola de fogueo, en un operativo que los Mossos d'Esquadra había activado ante su riesgo de fuga.

Según los Mossos, él y la madre, Marga Garau, habían reunido 918.000 euros obtenidos con donativos que se tenían que destinar a intervenciones médicas de envergadura y que supuestamente no se llevaron a cabo, y de esta cantidad presuntamente gastaron 600.000 en otros fines que nada tenían que ver con tratamientos médicos.