Los cocineros Álvaro Salazar, del Restaurante Argos (Port de Pollença), y Pedro Montolio, del Hotel Barcelona Princess (Barcelona), y el camarero Arnau Puig, del Restaurante Lasarte (Barcelona), han ganado la primera semifinal del VII Concurso Cocinero del Año y del III Concurso Camarero del Año.

Ocho cocineros y cinco camareros de Aragón, Comunidad Valenciana, Islas Baleares y Cataluña han disputado en Barcelona el pase a la final nacional en ambos concursos.

Según ha informado hoy la organización de ambos certámenes, los concursos han tenido lugar en la Escuela Superior de Hostelería de Barcelona (ESHOB), en donde los chefs han preparado, durante cinco horas, un menú compuesto por un primero, un segundo y un postre.

Álvaro Salazar ha preparado como entrante un sunomono de mariscos, moluscos y cefalópodos al Palo Cortao; de plato principal, anguila espinagada con kabayaki de palo y, de postre, sexy de fresas, rosa y cítricos.

Pedro Montolio ha optado por un ajoblanco con ceviche de caballa y ensalada de manzana ácida, apio y uva; una vieira y papada con guisantes, verduritas, setas y aire de setas y, de postre, un tiramisú con corazón líquido de café, Amaretto y cremoso de chocolate con haba tonka.

Nacido hace 30 años en Linares (Jaén), Álvaro Salazar se ha formado en restaurantes como Tragabuches, Echaurren o Ezcaray, y posteriormente ha trabajado en restaurantes como el Hotel Palacio del Bailío, La Seda, Sergi Arola Gastro, así como en París, Estocolmo o Kuwait, hasta que en 2011 se trasladó a Mallorca, donde actualmente dirige el Restaurante Argos.

Pedro Montolio (Barcelona, 1975) ha realizado estancias en el restaurante Gaig y en El Racó de Can Fabes, antes de trabajar profesionalmente en el Hotel Alimara, el Teatre Grec, el restaurante Franc, el Hotel Ritz, en el restaurante el Noticiero Universal y en el restaurante Manairo. En la actualidad, es jefe de cocina del Hotel Barcelona Princess (Barcelona).

Por su parte, Arnau Puig (Premià de Mar, 1993) ha sido el camarero que mejor ha completado una serie de pruebas teóricas y prácticas, entre las que se encontraba una cata de vino, el montaje de la mesa, la preparación de un coctel y de un café o el tiraje de cerveza.