Carretera y manta. El camino que hay que recorrer para empezar las vacaciones no sólo es un trayecto sino que se convierte en el principio de la aventura. Sobre todo, si te dispones a acumular cientos de kilómetros de asfalto a bordo de una furgoneta.

El 8 de marzo de 1950, Volkswagen fabricó la primera furgoneta de la gama Transporter que no sólo era apta para el trabajo sino también muy cómoda para viajar. Su popularidad creció como la espuma y en sólo cuatro años ya había en circulación más de cien mil ejemplares de la T1 (Transporter 1). Su éxito llevó a la dirección de Volkswagen a construir una nueva fábrica en Hannover que pudiera absorber la gran demanda de este vehículo.

La clásica Transporter. Foto: Getty Images.

No hace mucho, en 2013, dejó de producirse a nivel mundial la Kombi, la segunda furgoneta Transporter (T2) de Volkswagen (1967). Considerada como un objeto de culto, la Kombi trazó durante décadas el camino de numerosas familias y trabajadores en todo el mundo, sobre todo en Brasil, donde durante más de 30 años fue el único vehículo de carga que circuló por sus carreteras. Además, la T2 se convirtió en la mítica estampa de la generación hippy y exportó tanto por Europa como por América el lema 'Peace & Love'.

Sesenta años después, la pasión por el ´furgoneteo´vuelve a resurgir con fuerza y vive un nuevo momento de esplendor. La comodidad de moverse, dormir y cocinar en el propio vehículo continúa cautivando a miles de personas, en su mayoría jóvenes, con ansias de libertad, de ver, probar, divertirse, conocer.

El modo de vida de la furgoneta atrapa a muchos jóvenes con ansias de libertad. Foto: Getty Images.

Hoy en día comprarse una furgoneta de lo más equipada, es casi como hacerse con un apartamento portátil. Ofrecen todo tipo de comodidades, aprovechamiento del espacio, mobiliario interno fácil de montar y desmontar... No obstante, también está de moda y es mucho más económico, la opción de que uno mismo cree su propia distribución y mobiliario. Customizar el vehículo implica maña, horas, dinero y sobre todo mucha pasión. Eso sí, el resultado puede elevar la furgoneta a obra de arte, a un emblema sobre ruedas que acapara miradas, envidias y sueños. Este es el caso de algunas furgonetas míticas como las que vemos a continuación.

Esta y otras furgonetas en nuestra galería. Foto: theplaidzebra

Foto: theplaidzebra

Foto: theplaidzebra

Parada obligada: Amigos de las furgonetas, se reúnen en Girona

Para todos aquellos amantes de las furgonetas, cada año se citan en Sant Pere Pescador, un pequeño pueblo de Girona, miles de amantes de estos vehículos. Este año, cerca de 5.000 aficionados se citaron con sus más de 750 furgonetas en el camping la Ballena Alegre, para compartir experiencias, presumir de nuevos adornos, y exhibir vehículos que permanecen inmutables al paso del tiempo.

Durante la concentración, los asistentes posaron en la tradicional foto de familia que reunió a numerosos incondicionales de las furgos Volkswagen, modelos de todas las generaciones, desde los más actuales a algunos con más de 65 años de historia.