Ses Coves de Gènova, unas cavidades naturales ubicadas en el barrio palmesano de Gènova y descubiertas en 1906, vuelven a estar operativas tras permanecer cerradas "en estado de abandono" durante una larga temporada.

Así lo ha anunciado la entidad gestora de este espacio en un comunicado en el que ha recordado que el empresario y restaurador Alfonso Robledo está ahora al frente de la gestión de las cuevas y del restaurante.

Para poder abrir las puertas al público, Robledo ha llevado a cabo una reforma de las cuevas para mejorar la seguridad y la iluminación e introducir un espectáculo audiovisual en el interior.

A lo largo de tres kilómetros, los visitantes podrán disfrutar de unas cavidades conformadas por un conjunto de galerías subterráneas de origen calcáreo unidas por pasillos formados de manera natural.

Y precisamente para presentar esta reforma, ses Coves de Gènova ha organizado, este viernes por la noche, una fiesta de presentación donde, también se ha dado a conocer la reforma del restaurante.

Al encuentro acudieron más de 200 personas, entre ellas, la regidora de Turismo del Ayuntamiento de Palma, Joana Adrover y el presidente de Pimeco, Bernat Coll.