La joven diseñadora mallorquina Lorena Sánchez recibió ayer el mejor regalo de sus recién cumplidos 21 años al ganar el concurso Ad Talent para jóvenes diseñadores que abrió ayer los tres días de la Pasarela Adlib y que se celebró en la Sala Capitular del Ayuntamiento de Ibiza y la plaza de Espanya. Un escenario, que en teoría parecía ideal para el evento, pero que resultó incómodo para las modelos y muy caluroso para los asistentes que fueron colocados en el interior de la Sala Capitular.

El jurado, presidido por el diseñador Juanjo Oliva, evaluó los diseños de Sánchez como los mejores de entre las nueve finalistas de un concurso cuyo punto de partida era la artesanía balear. Bajo esa temática las diseñadoras dieron rienda suelta a su inspiración y a su aprendizaje para mostrar en sus prendas elementos poco habituales y algunos cortes llamativos.

No hubo diseños muy arriesgados ni tampoco grandes excentricidades, pero sí se pudieron ver algunos vestidos con formas extravagantes y voluptuosas. Quizás porque la temática, la artesanía balear, no invitaba a la exageración, en la pasarela se vieron vestidos de colores cálidos, líneas sobrias y texturas acordes con la climatología de las islas.

En esta primera edición presentaron sus proyectos un total de quince diseñadores, de los que solo nueve resultaron finalistas: las mallorquinas Andrea Estarellas (Bernardt), Ángela Vallori, Esperança Martínez, Lorena Torres, Patricia Perales y Sara Negre; y las ibicencas Jéssica Torres, Marianela Martín y Raquel Espada. Todas ellas, salvo Estarellas y Negre que concursaron por privado, pertenecen a las Escuelas de Arte de Ibiza, la Escuela Superior de Diseño de Balears (Easdib) y la Escuela de Diseño de Balears (EDIB).

Minutos antes de comenzar el concurso la diseñadora y profesora de la Escuela de Diseño Carme Coll comentó que en esta ocasión las alumnas habían trabajado a contrarreloj en los últimos meses ya que empezaron a preparar sus diseños después de Semana Santa. Coll valoró como de «gran calidad» las propuestas que se exhibieron ayer en el concurso. Fueron cuatro los diseños que presentó cada finalista y catorce las modelos que desfilaron por la pasarela.

Inspiración familiar

Cuando la presentadora del evento Clara Courel, en una improvisada entrega de premios y tras reconocer «el muchísimo calor» que habían pasado en el interior de la sala capitular, dio a conocer el nombre de la ganadora, ésta no pudo contener las lágrimas. Muy emocionada, Lorena Sánchez, aseguró que se había inspirado en los llaüts mallorquines y las trenzas de los senallons para sus modelos y que el premio, de 2.000 euros, lo invertirá en el proyecto de fin de carrera. También podrá realizar prácticas en el estudio del diseñador Juanjo Oliva. Sánchez señaló que de momento no se fija en ningún diseñador en concreto y que su inspiración eran su abuela, que fue sastre, y su abuelo, zapatero.

Además, a la joven diseñadora ya le salió su primer encargo, el que le hizo María Bufí, propietaria de Eiviluxury, uno de los patrocinadores del evento.

El concurso, que arrancó con media hora de retraso, estuvo amenizado por el cuarteto de viento Neumar y sus integrantes lucían vestidos de Charo Ruiz. Minutos antes de que se iniciara el concurso, se entregó un premio solidario que recayó en la ONG Kind Surf (una entidad que trata de acercar el deporte del surf y el mar a niños con discapacidad), cuya impulsora es la top model Almudena Fernández. El premio, de 3.000 euros, fue entregado por Rosa Tous, vicepresidenta de Tous y entidad patrocinadora de este galardón.