Los próximos 10.000 años pueden ser determinantes para nuestro planeta. Como consecuencia del cambio climático, un equipo de 22 científicos de la Universidad Estatal de Oregón auguran un cambio drástico para la Tierra hasta el punto en el que las ciudades costeras lleguen a desaparecer bajo el agua.

El dióxido de carbono (CO2) es el gran enemigo de la Tierra. Este compuesto químico permanece en la atmosfera durante un periodo de tiempo antes de ser eliminado por los procesos naturales y es en este punto cuando el planeta resulta perjudicado.

Las emisiones de carbono emitidas hasta ahora y durante los próximos 100 años permanecerán en la atmosfera durante decenas y centenas de años.

El estudio hace una llamada al ser humano para que tome partida en el asunto, ya que si no se consiguen desarrollar tecnologías capaces de eliminar el principal problema de la Tierra, el CO2, el pronóstico es cuanto menos preocupante. Raymont Pierrehumbert, coautor de la investigación, señaló: "Si queremos tener alguna tecnología de sustitución para evitarlo, deberíamos invertir mucho más en la eliminación del dióxido de carbono".

Cada año vemos nuevos huracanes, tormentas, tornados y otras catástrofes naturales que azotan la Tierra, y cada vez son más frecuentes. La investigación concluye apuntando que en 10.000 años los humanos habrán emitido el suficiente CO2 para provocar que la Tierra se caliente siete grados y que los niveles del mar aumenten unos 52 metros. Todo esto puede provocar consecuencias irrevocables para el clima global y la composición química de la atmosfera, algo que puede ser trágico.