Mallorca también fue destino obligado para el mítico actor Omar Sharif, que hoy murió a los 83 años de edad tras sufrir un ataque al corazón.

Fue en noviembre de 1970 cuando el protagonista de Lawrence de Arabia y Doctor Zhivago aterrizó en Son Sant Joan. Llegó cuando se hallaba en su plenitud como seductor planetario y se presentó con dos "auténticas beldades" —según las crónicas de la época— colgadas del brazo, tal y como se puede leer en el libro 'Mallorca siglo XX. Un destino obligado', en el que el periodista Matías Vallés recoge el paso de celebridades por nuestra isla.

"Para el gusto de las mujeres de hoy, Rodolfo Valentino no tendría nada que hacer a mi lado", aseguraba la estrella que se había desplazado a Palma para participar en el Torneo Internacional de Bridge Meliá Mallorca, un juego que ocupaba el primer lugar de sus preferencias, seguido "por este orden, por el cine y los caballos. Dejemos a las mujeres aparte".

Con 118 títulos a sus espaldas, entre los trabajos más recientes de Sharif destacan El guerrero número 13, película protagonizada por Antonio Banderas en 1999. También apareció en Océanos de Fuego junto a Viggo Mortensen, cinta que se estrenó en 2004. Su último trabajo lo realizó en 2013, la película marroquí Rock the Casbah.

A lo largo de su carrera se hizo con 11 galardones. Entre ellos dos Globos de Oro y un César, premio que le otorgó la Academia del Cine francés en 2004 por su papel protagonista en 'El señor Ibrahim y las flores del Corán'.