Un verano más, la Reina Sofía ejerce de embajadora social en su estancia en Mallorca. El lunes se interesó por la investigación que se realiza en la Universitat de les Illes Balears y con la intención de conocer de primera mano los trabajos que ejecutan los científicos, realizó una visita privada al laboratorio de Biomedicina Molecular y Celular, que investiga enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer. Doña Sofía estuvo acompañada por sus amigos

Tatiana Ratchild y su marido, el doctor Froucheau, que fueron recibidos por el rector de la institución académica, Llorenç Huguet, y el director general de Universidades, Investigación y Transferencia del Conocimiento del Govern, Miquel Deyà.

La comitiva se dirigió al edificio Guillem Colom Casasnoves, donde se ubica el laboratorio. Los catedráticos y miembros del grupo de investigación en Biomedicina Molecular y Celular, Pablo Escribá y Xavier Busquets, fueron los encargados de explicar a la Reina Sofía las investigaciones y los modelos experimentales que desarrolla este grupo dedicado al estudio del Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas. A lo largo del recorrido, la madre de Felipe VI se mostró muy interesada por el trabajo realizado por los expertos en biomedicina y no paró de hacer preguntas a los científicos. De hecho, esta visita a la UIB era de carácter privado y estaba motivada porque la reina madre tenía un interés personal en conocer la labor de este laboratorio.

Después de la visita al laboratorio, la comitiva se trasladó a la aula de grados del edificio Mateu Orfila i Rotger, donde se proyectaron unos audiovisuales de la investigación en patologías neurodegenerativas que lleva a cabo la UIB como el glioma, la lesión medular y el Alzheimer. Una vez finalizado el acto, Llorenç Huguet entregó a doña Sofía con un obsequio institucional.

Patente

El equipo de investigadores liderado por Escribá y Busquets diseñó y pantentó en 2009 la molécula ácido hidroxidocosahexaenoico (HDHA). El diseño de esta molécula se basa en una nueva hipótesis que plantea que la alteración neurológica que produce el proceso neurodegenerativo asociado a la enfermedad del Alzheimer está relacionada con una alteración de los niveles de lípidos de la membrana de la neurona.

La investigación de los científicos de la UIB ha demostrado por primera vez en ratones que el tratamiento con la molécula HDHA permite recuperar los niveles de los lípidos alterados por el Alzheimer, concretamente la fosfatidiletanolamina y los ácidos poliinsaturados. Las membranas lipídicas conforman una barrera selectiva que, además de separar, comunicar y definir las células y sus orgánulos internos, también recibe y propaga importantes señales que conrtolan el comportamiento celular. El pasado mes de julio, la institución académica se hizo eco de un dossier especial dedicado a la investigación de las membranas lipídicas del equipo de Biomedicina Molecular y Celular que fue publicado en la revista científica Biochimica et Biophysica Acta-Biomembranes.