El teniente de alcalde del ayuntamiento de Palma, Álvaro Gijón, presentó ayer en rueda de prensa la feria ´Cocinas del Mundo´ como una alternativa más a la oferta gastronómica y cultural de Palma, haciendo hincapié en la "importancia de ofrecer diferentes propuestas a los ciudadanos y al turismo de Mallorca".

La feria, que se celebra por primera vez en Palma, consiste en una muestra gastronómica internacional, como dice su eslogan "un viaje gastronómico por los cinco continentes", en la que alrededor de 15.000 personas podrán degustar platos de diferentes países y sin salir de Palma, bajo la gran carpa de 1.800 metros cuadrados ubicada en el Parc de sa Riera, que abrirá mañana y permanecerá abierta al público hasta el domingo. El lugar elegido es, para Gijón, "un punto a dinamizar, con buena seguridad, muy accesible para todo el mundo, con fácil aparcamiento y en el centro de la ciudad".

El presidente de Pimem Restauración, Alfonso Robledo, confirmó la participación de 19 restaurantes de diferentes nacionalidades, una muestra de los cinco continentes que "dará al visitante la oportunidad de probar una gran variedad de productos y la preparación de distintos estilos gastronómicos". Robledo calificó esta feria como un "punto de apoyo al empresario para dar a conocer su producto".

Además de la oferta gastronómica, la feria también aboga por la ayuda humanitaria gracias a la colaboración de los participantes con la ONG Fundació Banc d´Aliments de Balears, como demostró el gerente de Grup Trui, Lorenzo Jaume, al invitar a los asistentes a colaborar "donando alimentos de larga conservación en un punto que se habilitará para ello en el recinto ferial".

Cita de jueves a domingo

Mañana, día de la inauguración, el horario de la feria será de siete de la tarde a doce de la noche. El viernes y el sábado, la jornada será partida, desde las doce del mediodía hasta las cinco de la tarde y desde las siete hasta las doce de la noche. Y el último día, el domingo, la feria abrirá sus puertas durante doce horas de manera ininterrumpida, de doce de la mañana a doce de la noche, permitiendo saborear la cocina de los cinco continentes hasta el último minuto. El precio de la entrada es simbólico, un euro, con el fin de "asegurar el buen control de aforo y acceso", según informaron los organizadores del evento, la Asociación Restauración Pimem y el Grup Trui.