La Agencia Española del Medicamento aprobó ayer los requisitos para implantar la "unidosis", lo que permitirá a los médicos a partir de 2011 prescribir la cantidad exacta de pastillas que requieren los pacientes, con un ahorro estimado de 300 millones de euros anuales para el sistema de Salud.

Las compañías tendrán que comenzar a variar paulatinamente el formato con el que comercializan los fármacos, de modo que las cantidades de pastillas que contengan las cajas se ajusten a los tratamientos más comunes. Los pacientes recibirán las píldoras exactas que necesiten para su patología, evitando que se acumulen los productos en los hogares al tiempo que se mejorará la calidad de la prestación que reciben, indicó la ministra Leire Pajín.

El ahorro de la unidosis se unirá al descenso del precio de los medicamentos sujetos a patentes, hasta elevarse a 1.300 millones de euros, y se reducirá además la factura farmacéutica, que alcanzó en 2009 unos 12.500 millones de euros.