El director del Institut d´Estudis Catalans, Salvador Giner, presentó ayer la sede del instituto catalán en Palma, delegación que estará dirigida por Damià Pons y se instalará próximamente en Can Oleo.
A lo largo de su intervención, Giner hizo hincapié en la gran labor de esta entidad en la difusión y la investigación de numerosos aspectos que conciernen a los países de habla catalana. Una trayectoria iniciada hace más de un siglo, desde el novecentismo, con la intención de conservar la lengua y su patrimonio, y que con el paso de los años de ha extendido a muchas otras disciplinas. "Una misión histórica que no ha terminado nunca", afirmó Giner. El Institut d´Estudis Catalans es hoy una institución de gran impronta que "continúa el trabajo del pasado con las exigencias morales del presente" y que ahora tendrá su sitio en las islas.
