La Iglesia católica atendió en 2009 en Mallorca a más de 50.000 personas en hospitales, ambulatorios, casas de ancianos, personas con discapacidad, orfanatos y guarderías, según los datos del informe anual del Obispado de Mallorca, presentados con ocasión de la celebración del domingo de la Iglesia Diocesana.

La Iglesia ha ofrecido también su "calor humano" en casas y residencias, centros de asistencia a inmigrantes, refugiados, de rehabilitación de drogodependientes e instituciones para la promoción de la ocupación y la erradicación de la pobreza.

A lo largo de 2009 se celebraron 4.000 primeras comuniones, 810 confirmaciones y 1.160 casamientos, recoge el informe, donde se concreta también que en el mundo hay 174 misioneros mallorquines: sacerdotes, religiosos y seglares.

El obispado también ha dado cuenta del balance económico de 2009 en el que figura que el endeudamiento de las parroquias por la rehabilitación del patrimonio histórico ascendió a 9,6 millones de euros, 220.000 euros menos que el año anterior. Mientras tanto, el gasto en rehabilitación fue de 4,7 millones, unos 560.000 euros más que en 2008.