El director de la película "Los hombres que no amaban a las mujeres", el sueco Neils Arden Oplev, se pregunta por la necesidad de una nueva versión como la que proyecta Hollywood de su filme.

La nueva versión en inglés de la película, basada en la novela policíaca homónima del sueco Stieg Larsson, la dirigirá David Fincher, el realizador de "The Social Network" ("La Red Social").

Pero en declaraciones publicadas en el portal de World & Film, Oplev critica el plan de dar a una actriz estadounidense el papel de Lisbeth Salander, y compara el proyecto con la infeliz versión de la película francesa "La Femme Nikita", con Bridget Fonda como protagonista.

"Hasta en Hollywood hay cierta irritación por ese 'remake'. ¿Qué necesidad existe de una nueva versión (en inglés) de algo cuando puede verse el original?", se pregunta Fincher.

El filme de Oplev, estrenado el año pasado, fue el primero de los tres basados en la serie "Millennium", de Larsson, y tiene el récord de recaudación en Escandinavia con más de 16 millones de dólares (11,5 millones de dólares) de ingresos en taquilla.

La queja de Oplev puede aplicarse igualmente, comenta hoy el diario británico The Guardian, al filme "Let me in" ("Déjame entrar"), "remake" estadounidense recién estrenado en Gran Bretaña de otra película sueca, esta vez de vampiros, "Let the Right One in", de Tomas Alfredson.

Jason Wood, director de programación de la cadena británica de cines independientes Curzon, dijo que había decidido no ofrecer la nueva versión en sus cines porque el original sueco era muy superior y muchos lo considerarían "casi un sacrilegio".

En la versión original de "Los hombres que no amaban a las mujeres", el personaje de Lisbeth Salander lo interpreta la actriz sueca Noomi Rapace, y, según Oplev, "ese rol debería ser siempre y sólo suyo: no veo que nadie pueda competir con ella".

A Rapace se le ha ofrecido un papel en la próxima película de Sherlock Holmes junto a Robert Downey Jr, Jude Law y Stephen Fry.