Un equipo de investigadores abrió ayer la posibilidad de tener una fuente interminable de sangre al anunciar el descubrimiento de una técnica que permite transformar directamente células de la piel de adultos en sangre.

El descubrimiento de un equipo de científicos de la Universidad McMaster de Canadá dirigidos por el doctor Mick Bhatia, y entre los que se encuentra la investigadora española Ruth M. Risueño, fue publicado ayer en la revista Nature.

"Esencialmente hemos revelado el método que nos permite tomar células de la piel de adultos y transformarlas en progenitores de sangre, células sanguíneas, sin que tengan que pasar una etapa intermedia que son las células madre pluripotentes inducidas (IPS)", explica el doctor Bathia.

"Hemos utilizado dos clases de células de la piel. El equipo investigó células de recién nacidos así como las de sujetos mayores. Y al menos para esos casos, el resultado fue prácticamente lo mismo" añade el doctor Bhatia, director del Instituto de Investigación de Células Madre y Cáncer de la Universidad McMaster.

La investigadora Ruth M. Risueño, la tercera firmante del artículo que aparece en Nature, explicó que la importancia de la transformación directa de células de la piel "a sangre madura es que se evitan los problemas asociados con los estados de pluripotencia".

La doctora Risueño, que se encuentra en McMaster como parte de una estancia postdoctoral que está a punto de finalizar, explicó que el proceso fue descubierto "cuando estábamos generando las IPS con los factores ya descritos clásicos, y observaron que había unas células en los cultivos que recordaban en la morfología a las células sanguíneas".

Risueño añade que "la primera población sanguínea que nos aparece sería una de tipo progenitor y somos capaces de diferenciarla en (las células sanguíneas) eritrocitos, mieloides, monocitos y granulocitos".